Cualquier perfume al ser inspirado produce un efecto psicológico, físico y espiritual instantáneo. Cada aroma influye de una manera distinta.
Los aromas pueden transferirse mediante perfumes, óleos, shumerios, inciensos, etc.
Cada aceite esencial, dependiendo de sus componentes, presenta una determinada volatilidad. Si utilizamos aceites muy volátiles para elaborar un perfume, el resultado olerá intensamente pero con brevedad en el tiempo.
Si nos aplicamos este perfume sobre la piel, apenas durará su aroma.
Por este motivo, los perfumes se realizan combinando aceites esenciales muy volátiles con otros menos volátiles, y por tanto más duraderos, ya que se evaporan más lentamente. De esta forma tendremos un perfume cuyos componentes se evaporan de forma progresiva y conseguimos mayor duración del aroma.
En la elaboración de perfumes los aceites esenciales se clasifican en lo que se denominan Notas, según la durabilidad y volatilidad de sus aromas. Existen NOTAS BASE, MEDIA Y SUPERIOR.
NOTA BASE : El aroma de estos aceites dura hasta una semana. Penetran más profundamente en la piel. En el momento inicial puede que el aroma no sea particularmente intenso, pero si se deja en la piel puede alcanzar un olor fuerte.(Patología física)
NOTA MEDIA :La intensidad del aroma se asemeja al de las notas superiores. Estos aromas pueden durar hasta tres dias. Actúan como ecualizadores, ya que son capaces de controlar la intensidad o mayor actividad de los otros aceites esenciales. Normalmente constituyen el 50% de la fórmula.(Patología emocional)
NOTA SUPERIOR: Son penetrantes, de olor fuerte, estimulantes, inspiradores y volátiles por naturaleza. El aroma puede durar hasta 24 horas, aunque la mayor influencia se produce en el primer momento del contacto. Cuando se ponen en la piel hay sensación de calor o frescor, no de tibieza. (La fragancia que más guste al paciente)
Lo normal es que los perfumes contengan aceites esenciales de toda la escala de notas aromáticas. Como regla general, del total de aromas de un perfume el 30% son notas superiores, el 50% notas medias y el 20% notas base. Pero nada impide componer un perfume que sólo incluya notas base o sólo notas superiores.
Es imprescindible tener en cuenta que al mezclar los aceites esenciales de nota superior con otros de nota base, a veces el perfume huele “a saltos”, es decir, hay una separación muy marcada entre el olor de un aceite esencial y otro. Esto hay que evitarlo, ya que el perfume debe tener un aroma de conjunto, de forma que la evaporación de los componentes más volátiles desenmascare el aroma de los menos volátiles y así sucesivamente hasta llegar a las notas base, pero siempre de forma armoniosa sin que se produzcan saltos que nos recuerdan a los aceites individuales que componen el perfume.
Para conseguir estoy hay que tener en cuenta que algunos aceites esenciales “aproximan” el aroma de aceites más volátiles al de los más volátiles y viceversa, es decir, aproximan las notas base a las media o las superiores a las medias. También hay aromas, como el del amaro (salvia sclarea) que usado de forma precisa consigue un efecto de redondeo global del perfume, aproximando las notas inferiores a las superiores y viceversa.
Esencias de superiores a media: Albahaca, angélica, bergamota, cardamomo, geranio, hierba limonera, hisopo ,lavanda, nerolí y petit grain, canela, clavo, eucalipto, hierbabuena, lima y limón, naranja, nerolí, niaouli
Esencias de media a superiores: Amaro, enebro, hinojo,gálvano, geranio, lavanda, manzanilla, nerolí, palmarosa, pimienta negra, pino, rosa, hojas de violeta.
Esencias de medias a base: Ciprés, clavel, ylang ylang, flor de naranjo, zanahoria, jazmín, mirra y vainilla, mejorana, melisa
Esencias de base a medias: elemí, incienso, jazmín, madero de cedro, benjuí, mirra, ylang ylang, musgo de roble y sándalo.
