Sentadillas: Son clásicas y básicas a la hora de tonificar los músculos de las piernas y los glúteos. Para hacerlas correctamente, hazlas como si te fueras a sentar derecho en una silla, mantén la columna y tu cuello en una línea recta y no dejes que tus rodillas sobrepasen la altura de tus pies.
Desplantes: Muy fáciles de hacer, sólo tienes que poner una pierna adelante y la otra atrás abriendo las piernas y bajar con la espalda recta. No olvides cambiar de pierna para trabajar ambas.
Subir una colina: Si sales de tu casa y te vas a un parque, seguro hay una parte empinada que puedas subir y bajar varias veces (depende de su tamaño). Si no encuentras una colina, puedes subir escaleras y también tendrás un buen ejercicio.
Ranitas: Recordando los ejercicios de la clase de actividad física en primaria, las ranitas son como las sentadillas pero brincando. Baja totalmente y después impúlsate con piernas y brazos hacia arriba y adelante. A ver cuántas aguantas.
Patadas: No se trata de patear gente, pero dar patadas al aire con control, puede ser un gran ejercicio para tus piernas y glúteos. Intenta darlas en todas las direcciones.
Bicicleta: Ya sea que en serio saques la bici y te vayas a dar una vuelta o que te acuestes en el piso y simules el movimiento de pedalear una bici en el aire, ambos ejercicios tonificarán los músculos.
Jumping Jacks o saltos de mariposa: Brincar abriendo brazos y piernas al mismo tiempo y cayendo en una pequeña sentadilla. Ten cuidado con las rodillas.
