El cerebro tiene una química asombrosa, capaz de producir sustancias químicas que provocan que la persona eleve su autoestima, experimente sensación de euforia, se sienta animada, alegre y vigorosa, sin necesidad de fumar, tomar o inyectarse “algo”.
En la lista siguiente encontrarás algunas drogas que el cerebro produce y las cuales están relacionadas con lo mismos efectos que producen las drogas externas.
OXCITOCINA: es una hormona que estimula la sexualidad, capaz de crear alegría y euforia en el individuo.
DOPAMINA: encargada de la creatividad y la fantasía, elimina las fronteras entre el genio y la locura. Da posibilidad a los movimientos armoniosos y refinados y estimula y acelera la inteligencia y la actitud comprensiva. Esta es la droga de los artistas, músicos, dibujantes, pintores, bailarines, etcétera.
ENDORFINA: esta droga actúa como analgésico del dolor; son un elixir para el optimismo y la alegría, es la que provoca los sentimientos de satisfacción e ingratitud en el individuo.
SEROTONINA: esta hormona se encarga del equilibrio interno y la tranquilidad; es el elixir de la esperanza, la fe, la expectativa de lo grandioso. Provoca motivación, optimismo, valoración; sin embargo, esta hormona también puede causar los efectos contrarios a los mencionados.
HORMONAS DE LA GLÁNDULA PINEAL: influyentes en el estado de ánimo e iniciativa, promueven los estados de liderazgo y la ambición de crecimiento en todo sentido.
¿Cómo puede uno estimular dichas drogas en el cerebro?
La respuesta es muy sencilla: con un pensamiento enfocado que sea equivalente a las emociones que uno quiere provocarse.
Por ejemplo, si quieres obtener felicidad, deberás tener la fortaleza de tener un pensamiento plenamente enfocado es dicha actitud. Poco a poco tu cerebro comenzará a generar la química necesaria elaborar dicha droga.
La alegría o los estados anímicos de plenitud, gozo y libertad, no son algo vago y caprichoso, sino la consecuencia de un flujo correcto de sustancias químicas que proporcionan al ser humano su equilibrio físico y mental.
A medida que seas más fuerte de mente, menos sustancias externas necesitarás no sólo para ser feliz, sino para curarte y mitigar dolores y realizarte en todo sentido.
Química del pensamiento, Dr. José Cruz Ramírez, Colección Nueva Ciencia.