Las famosas dietas que prometen hacerte perder mucho péso en periodos muy cortos de tiempo tienen considerables riesgos para la salud.
Provocan:
• Déficit de proteínas, vitaminas y minerales por la falta de consumo con los alimentos.
• Efectos psicológicos adversos.
•
Pueden provocar transtornos de conducta ya que la persona puede generar
cierto nivel de adicción a este tipo de dietas porque psicológicamente
un menor peso le provoca una incorrecta sensación de felicidad
• Favorecer el efecto “rebote” o “yo-yo”.
•
Al terminar la dieta la persona no a adquirido hábitos de alimentación
saludable, mas bien tiende a retomar la ingesta habitual de comidad pero
menos veces al día, lo que provoca un mayor letargo en su sistema
metabólico
Dieta disociada Hay
Fundamento: Los alimentos no aumentan el peso, sino sus combinaciones.
Sistema: Disociación durante la digestión en el estómago.
Teoría:
No consumir hidratos de carbono junto a proteínas porque se digieren en
medio ácido. Los hidratos de carbono en medio alcalino.
Restricciones: Leche, frutas, casi todas las verduras, pan, pastas, cereales, arroz, féculas, legumbres y azúcares.
Permisiones: Carnes, pescados, huevos, embutidos, algunos quesos, café, aceites, vísceras, mariscos y alcohol.
Error: Este tipo de consumo es casi imposible porque no existen alimentos solamente proteicos o carbohidráticos.
Observación: Carece de fundamento científico y los resultados sólo obedecen a un menor consumo de energía.
Dietas peligrosas
Dieta de Atkins
Fundamento: Retira el consumo de hidratos de carbono y potencian el consumo de proteínas y grasas para adelgazar.
Sistema:
Se basa en un consumo casi exclusivo (90%) de proteínas y deja un
mínimo espacio (10%) a hidratos de carbono extraídos de las verduras y
frutas.
Teoría: Evitar azúcares o carbohdratos por que estimulan la producción de insulina (responsable del aumento de peso).
Permisiones: Carnes rojas, embutidos, quesos, huevos, mariscos, mantequillas, etc.
Restricciones: Pastas, harinas, arroz, masas, legumbres, azúcar y bebidas alcohólicas.
Error: Eliminar la principal fuente de energía del organismo.
Observación: Al consumir grasa sin carbohidratos se estimula la secreción de acetonapara usarla como fuente energética.
Riesgo:
Falta de apetito, halitosis o acetona en el aliento, estreñimiento,
colesterol, ácido úrico, riesgo cardiovascular, sobrecarga del riñón.
Dieta Clínica Mayo
Fundamento: Consiste en seguir una dieta rica en proteínas
Sistema: Disminución drástica de la ingestión de energía mediante una disminución del gasto energético.
Teoría:
Al consumir pocas calorías (1.200 diarias), la grasa se quema rápido,
aunque el contenido proteico de esta dieta supere el doble de lo
recomendado.
Permisiones:
Huevos (entre 4 y 6 diarios), pescados, aves, carnes, verduras, frutas,
frutos secos y productos integrales cocinados sin grasas, té y café.
Restricciones: Lácteos.
Error: Provoca un efecto rebote (aumento de masa grasa y pérdida de masa muscular).
Observación: Grandes deficiencias en nutrientes.
Riesgo:
Provoca acidosis (acidificación del pH de la sangre) y cetosis
(presencia de cuerpos cetónicos en sangre). Deficiencias de calcio y, en
consecuencia, riesgo de osteoporosis e hipertensión, sobrecarga renal.
Dieta de la sopa
Fundamento: Consumo de sopa baja en calorías por siete días en grandes cantidades.
Sistema:
Se la prepara con seis cebollas, dos ramilletes de apio, dos pimientos
verdes, medio kilo de tomate, un repollo, un cubito de caldo, sal y
pimienta, hervidos en 10 litros de agua.
Permisiones:
Se combina la sopa con un día de frutas, otro de verduras, otro con
leche descremada, otro de arroz integral y carnes.
Restricciones: Todo está prohibido, especialmente el alcohol, la harina y sus derivados, los dulces y las bebidas con gas.
Error:
Provoca deficiencias de proteínas, vitaminas y minerales. Se adelgaza a
expensas de perder líquidos, electrolitos, reservas de proteínas y en
un menor porcentaje grasa, que es lo que realmente interesa perder.
Observación: Poseen escaso valor calórico y energético.
Riesgo: No proporciona suficientes aminoácidos y ácidos grasos esenciales, calcio, hierro y vitaminas A, D, E y K.