Si te sientes triste porque tus viejos Levi’s desgastados
que están en el fondo de tu armario ya no suben más allá de las
caderas, no te desesperes. Simplemente no es realista que juzgues a tu
cuerpo por los patrones de la escuela secundaria.
El factor hereditario, las hormonas, el metabolismo, la disminución de la masa muscular y un estilo de vida más sedentario son algunos de los factores que nos llevan a aumentar de peso con los años y a luchar después para quitarnos ese peso de encima. Si bien es posible que no vuelvas nunca a entrar en esos vaqueros que usabas en la secundaria, puedes aspirar a alcanzar tu propio peso “saludable”.
Y por “saludable” nos referimos a un peso que no sólo puedas alcanzar sino que también puedas mantener con unos hábitos alimenticios saludables y abundante actividad física.
¿Por qué aumentamos de peso?
Antes de tratar de encontrar tu peso saludable, es útil comprender por qué motivo has aumentado libras con el paso de los años. Los malos hábitos alimenticios y no hacer suficiente ejercicio suelen ser los culpables habituales. Pero también hay otros factores que entran en juego.
El factor hereditario. La genética podría ayudar a explicar tu aumento de peso. Por ejemplo, si tus padres y hermanos tienden a aumentar de peso en el área abdominal, es posible que tú también tengas que luchar para deshacerte de la persistente grasa abdominal.
Embarazo. A muchas mujeres les resulta difícil volver al peso que tenían antes del embarazo y se desaniman ante la visión de la grasa que ha aparecido en su barriga, que puede ser difícil de eliminar con el ejercicio y la dieta.
Hormonas. Las mujeres tienden a añadir grasa corporal en los años previos a la menopausia y esto se traduce en un aumento de peso de 1 libra al año. Y es posible que continúen aumentando de peso durante la menopausia, posiblemente como consecuencia de la disminución de los niveles de estrógeno.
El aumento de peso relacionado con la menopausia no es inevitable, pero es necesario hacer un esfuerzo adicional para evitarlo. Según la Clínica Mayo, después de la menopausia, la mayoría de las mujeres puede lograr mantener su peso con un consumo de 1,500 a 1,600 calorías al día. Para los hombres, una disminución gradual en los niveles de testosterona contribuye al aumento de la grasa corporal y a la disminución de masa muscular magra.
Para ambos sexos, el envejecimiento trae consigo la disminución del índice metabólico.
Simplemente ya no es posible quemar calorías con la misma eficiencia que antes, por lo que se necesita una mayor actividad física para obtener resultados similares.
Encuentra ese número mágico
El factor hereditario, las hormonas, el metabolismo, la disminución de la masa muscular y un estilo de vida más sedentario son algunos de los factores que nos llevan a aumentar de peso con los años y a luchar después para quitarnos ese peso de encima. Si bien es posible que no vuelvas nunca a entrar en esos vaqueros que usabas en la secundaria, puedes aspirar a alcanzar tu propio peso “saludable”.
Y por “saludable” nos referimos a un peso que no sólo puedas alcanzar sino que también puedas mantener con unos hábitos alimenticios saludables y abundante actividad física.
¿Por qué aumentamos de peso?
Antes de tratar de encontrar tu peso saludable, es útil comprender por qué motivo has aumentado libras con el paso de los años. Los malos hábitos alimenticios y no hacer suficiente ejercicio suelen ser los culpables habituales. Pero también hay otros factores que entran en juego.
El factor hereditario. La genética podría ayudar a explicar tu aumento de peso. Por ejemplo, si tus padres y hermanos tienden a aumentar de peso en el área abdominal, es posible que tú también tengas que luchar para deshacerte de la persistente grasa abdominal.
Embarazo. A muchas mujeres les resulta difícil volver al peso que tenían antes del embarazo y se desaniman ante la visión de la grasa que ha aparecido en su barriga, que puede ser difícil de eliminar con el ejercicio y la dieta.
Hormonas. Las mujeres tienden a añadir grasa corporal en los años previos a la menopausia y esto se traduce en un aumento de peso de 1 libra al año. Y es posible que continúen aumentando de peso durante la menopausia, posiblemente como consecuencia de la disminución de los niveles de estrógeno.
El aumento de peso relacionado con la menopausia no es inevitable, pero es necesario hacer un esfuerzo adicional para evitarlo. Según la Clínica Mayo, después de la menopausia, la mayoría de las mujeres puede lograr mantener su peso con un consumo de 1,500 a 1,600 calorías al día. Para los hombres, una disminución gradual en los niveles de testosterona contribuye al aumento de la grasa corporal y a la disminución de masa muscular magra.
Para ambos sexos, el envejecimiento trae consigo la disminución del índice metabólico.
Simplemente ya no es posible quemar calorías con la misma eficiencia que antes, por lo que se necesita una mayor actividad física para obtener resultados similares.
Encuentra ese número mágico
El
peso saludable será diferente para cada persona, nos dice Robin Bowman,
RD, dietista del programa de control de pérdida de peso y cuidados
avanzados de pacientes bariátricos de Summa Health System en Akron,
Ohio. “Si estás contento con cómo te queda la ropa, estás saludable y
puedes hacer las cosas que te gusta hacer, ya sea hacer ejercicio o
correr detrás de los niños, entonces es probable que hayas encontrado tu
peso ideal”, dice.
Un obstáculo para encontrar y
permanecer en el peso ideal es una trampa conocida como el “síndrome de
falsas esperanzas” que te lleva al fracaso por el hecho de tener
expectativas poco realistas, nos dice Bowman. Es posible que te hayas
fijado metas inalcanzables al querer perder demasiado peso tan
rápidamente. En ocasiones, no alcanzar dichas metas podría hacer que las
personas que están a dieta entren en un ciclo de aumento y pérdida de
peso. Un mejor enfoque consiste en pensar acerca de cuál ha sido tu peso
más bajo y más alto en la adultez.
A menos que siempre hayas tenido
problemas de sobrepeso, es probable que tu peso saludable se encuentre
entre estos dos, y aquel que puedes mantener a lo largo de un periodo
prolongado. Es probable que quienes han luchado con un problema de peso
necesiten la ayuda de su médico o dietista registrado para ayudarlos a
determinar cuál debería ser su peso.
Para alcanzar un peso que sea saludable para ti, es posible que tengas que aumentar tu actividad física,
añadir entrenamiento de resistencia para aumentar la masa muscular
magra y consumir menos calorías o menos grasa. Un dietista puede ayudarte a elaborar un programa de pérdida de peso que se adapte a tus necesidades. Para encontrar a un dietista, visita www.eatright.org, el sitio web de la Asociación Americana de Dietética. Podrías considerar contratar a un entrenador personal para ayudarte a desarrollar un programa de ejercicio personalizado que combine actividad aeróbica y entrenamiento de resistencia. Si nunca has sido una persona activa o si hace mucho que lo fuiste, habla con tu médico para asegurarte de cuál es la opción correcta para ti.