Entérate de los riesgos de usar toallas higiénicas y los beneficios para tu salud de usar alternativas como la copa menstrual.
Las mujeres menstruamos aproximadamente 5
 días al mes. En un año son entonces 60 días. Por lo tanto si 
menstruamos durante aproximadamente 40 años, sería un total de 2400 días
 u 80 meses o 6,7 años que equivale a 6 años 8 meses y 2 semanas. Esto 
implica mucha sangre, por lo que necesitamos protección. Para 
eso encontramos en supermercados y farmacias “protecciones femeninas”. 
Hay muchas marcas de tampones, toallas higiénicas y protectores diarios,
 como también distintos modelos de estos; para que así nosotras podamos 
encontrar una que nos guste, “un producto para cada necesidad”, usan de 
eslogan algunas compañías. Con alas, sin alas, ultra-fina, tela malla, 
tela suave, flujo abundante, flujo mediano, poco flujo, nocturnas, 
aromáticas, de colores y diseños muy lindos. Todos los meses las mujeres
 se abastecen de la cantidad necesaria de protecciones. Una 
mujer utiliza aproximadamente 5 toallas higiénicas normales 
diarias, usamos entonces un total de 25 toallas higiénicas durante un 
mes, o bien 3 toallas normales y 1 toalla nocturna sumando 15 toallas 
normales y 5 toallas nocturnas al mes. Cada toalla higiénica vale 
aproximadamente 70 pesos chilenos y las toallas nocturnas 100 pesos c/u.
 En un mes gastamos entonces entre 1.550 y 1.750 pesos. Si a eso le 
sumamos los gastos de tampones y protectores diarios son aproximadamente
 5.180 pesos más al mes. En un año el gasto puede llegar a ser entre 
23.780 y 26.080 pesos. En cuarenta años es un total de 951.200  y 
1.043.200 pesos esto SOLO si utilizamos las marcas más 
económicas y no tenemos un flujo abundante. Si tenemos flujo normal 
usamos entonces aproximadamente 13.000 toallas higiénicas a lo largo de 
nuestra  vida. Si cada toalla después de usada pesa 5 gramos, producimos
 65 kg de basura al año solo en toallas  higiénicas. En cuarenta años 
son 2. 600 kg de basura. O sea que cada cien mujeres menstruantes en 
Chile  producimos 6.500 kg de basura al año. En cuarenta años tiramos a 
la basura 260 toneladas de protección menstrual altamente 
 contaminante y no degradable en nuestro medio ambiente. Recordemos que 
una toalla higiénica  demora en degradarse no 100 años ni 200 años sino 
500 años! En los paquetes de las toallas no se informa sobre las 
sustancias y materias primas que se utilizan para la fabricación de los 
apósitos. En algunas se da a conocer solo la celulosa, polietileno (uno 
de los plásticos más comunes), papel siliconado, algodón, poliéster, 
polipropileno (tela plástica no tejida), pulpa de papel blanqueada y 
aromatizantes. En Internet podemos encontrar más información sobre los 
componentes tóxicos utilizado: dioxina, poliacrilato, rayón y asbesto.
Dioxina: Es un 
componente altamente toxicó no deseado, su producción química implica el
 cloro. Este último se utiliza para blanquear los tampones, toallas 
higiénicas y protectores diarios. De este proceso industrial se derivan 
las dioxinas que quedan en los productos blanqueados. Las dioxinas 
afectan seriamente los órganos reproductores provocando problemas de 
reproducción y desarrollo, puede causar malformaciones fetales, afecta 
el sistema inmunitario y el resto de los tejidos en nuestro cuerpo. Es 
una sustancia de descomposición lenta y almacenable en el cuerpo, su 
interferencia con nuestras hormonas hace que la dioxina sea catalogada 
como una sustancia cancerígena. Se le asocia como uno de los causantes 
de la endometriosis, enfermedad ginecológica que consiste en el 
crecimiento descontrolado de los tejidos endometriales (mucosas que 
recubren las paredes uterinas), esta enfermedad puede provocar 
dismenorrea (menstruación dolorosa), dolores pélvicos e 
infertilidad. Expertos señalan que este compuesto no se elimina con 
facilidad, pueden tardar cinco años en reducirse a la mitad, no se 
degradan y por tanto, van acumulándose en los tejidos. Una simple dosis 
de la dioxina más letal puede matar a una rata.
Poliacrilato: Es un
 compuesto químico. Es un polvo blanco sin olor que tiene la capacidad 
de absorber grandes cantidades de líquido. Esto se  utiliza   como el 
famoso “gel absorbente”. Estudios demuestran que está asociado con el 
síndrome del shock tóxico (SST) al  igual que  el rayón. El SST es 
causado por una toxina producida por ciertos tipos de bacterias 
estafilococos. El uso de  tampon, sobretodo si se deja por mucho tiempo,
 puede causar esta enfermedad. Los síntomas son confusión, diarrea, 
dolores de cabeza, fiebre, hipotensión (baja de la presión arterial), 
dolores musculares, náuseas, vómitos, crisis epilépticas, convulsiones y
 en los peores casos puede llegar a la insuficiencia en órganos como en 
los riñones y el hígado.
Rayón: Es un tejido 
sintético. Las fibras artificiales se obtienen a partir de sustancias 
químicas que se producen de materiales como el petróleo, la madera y el 
carbón.  Esta fibra es altamente absorbente y se utiliza para contener 
la sangre y los fluidos vaginales. Impide que la piel respire 
normalmente. Además, retiene la humedad, provocando el aumento de la 
transpiración corporal, esto puede provocar heridas en la vagina y un 
aumento anormal de la flora bacteriana que puede derivar en infecciones 
vaginales e infecciones urinarias. Cuando se utilizan tampones al 
sacarlo de la cavidad vaginal quedan fibras adentro, restos de tampon 
que también pueden las más diversas molestias como mal olor, 
infecciones, sangramientos, SST, entre otras.
Asbesto: El asbesto
 es un grupo de minerales que se utiliza en tejas, azulejos, planchas de
 pizarreño, baldosas, cemento, productos de papel, embragues de autos, 
frenos, envases, paquetería, revestimientos, pintura, talco, toallas 
higiénicas y tampones.  El Departamento de Salud y Servicios Humanos, la
 Oficina de Protección Ambiental y la Oficina Internacional para la 
Investigación del Cáncer de los Estados Unidos demostraron que los 
productos relacionados con el asbesto provocan cáncer. El ministerio de 
salud en Chile elaboro el“Manual para la Elaboración de un Plan de 
Trabajos con Materiales que Contienen Asbesto Friable y no Friable” aquí
 explican que el mineral puede producir daños irreversibles a la salud, 
este mineral ha sido catalogado como altamente cancerígeno  para el ser 
humano. Por otro lado existen estudios que desmienten la utilización del
 asbesto en toallas higiénicas y tampones, pero también existen estudios
 que corroboran su existencia como estrategia de mercado.  Donna C. 
Booisseau, de la Universidad de Illinois, indica que: “La industria del 
tampon incluye asbesto en sus productos con la intención de hacer 
sangrar más a las mujeres durante su período menstrual y favorecer así 
el aumento de consumo de esta mercancía”.
Estamos siendo agredidas mes a mes con 
tóxicos en nuestros cuerpos que pueden ocasionarnos enfermedades 
mortales y además estamos dañando nuestro medio ambiente cada vez que 
utilizamos alguno de estos productos. Los fabricantes de las toallas, 
protectores diarios y los tampones conjuntamente con los gobiernos nos 
manipulan a través de propaganda de que estos productos son la mejor 
opción para cuando estamos menstruando. Así se encargan de ignorar los 
componentes tóxicos y sus consecuencias en la salud de la mujer y al 
mismo tiempo mantenernos ignorantes frente a este tema.
No mas manipulación por
 parte de las grandes empresas y los políticos! Es hora de que estos 
entes no sigan enfermando y contaminando nuestros cuerpos para llenarse 
los bolsillos. Es hora de de actuar y tomar conciencia!
Experimenta otras alternativas y no te 
ciegues con lo que el mercado nos dice. Existen productos alternativos a
 la toxicidad que hay en farmacias y supermercados. Las alternativas son
 positivas para tu comodidad, economía, tu salud y el medio ambiente. A 
continuación te presentamos dos alternativas ecológicas, económicas, 
higiénicas y sin daños a nuestro cuerpo.
Toallas higiénicas ecológicas: Son
 100% de algodón, absorbentes y sin químicos, se reutilizan lavándolas 
después de su uso. Nos mantienen frescas, limpias y seguras. Son 
cómodas, re utilizables y biodegradables. Dependiendo del cuidado que se
 las tenga duraran entre 2 a 4 años. Puedes encontrarlas en la web si te
 interesa comprarlas o hacerlas tú misma siguiendo un tutorial 
en youtube.
Copa menstrual: 
Existen muchas marcas con variados nombres. Se utiliza como un tampon, 
la diferencia es que almacena la sangre y los fluidos vaginales, no los
 absorbe como los tampones, lo que no provoca sequedad vaginal y por 
esto no tiene riesgo de ocasionar infecciones. Almacena aproximadamente 
30 ml, por lo tanto no es necesario vaciarla tan seguido como las 
toallas o los tampones. No tiene químicos, está hecha de silicona blanda
 y se hierve en casa después y antes de usarla para eliminar posibles 
bacterias. Puede durar hasta 10 años si la cuidamos como se debe.
Crear conciencia es tarea de todas y
 todos!  Promovamos las alternativas no invasivas, como son la copa y 
las toallas de género! Cuidemos nuestra salud, nuestro medio ambiente, 
nuestra economía.
NO MÁS TÓXICOS EN NUESTROS CUERPOS!
AcciónFem!
Por Anahí Hormazábal Contreras
Enfermera de la Universidad de Uppsala
Integrante de AcciónFem

 
