En el cuerpo de las conferencias y los libros que ha escrito el decimocuarto Dalai Lama se encuentran varias enseñanzas acerca de la sexualidad, desde el punto de vista del budismo tántrico. Aquí reunimos algunas citas en torno a ello.
Estas son algunas citas interesantes del
décimocuarto Dalai Lama sobre la sexualidad, entendida bajo el concepto
del budismo tántrico. El hilo conductor de las citas es el cultivo de
la mente por medio de la práctica sexual, que puede detonar niveles
profundos de conciencia y ser parte de la práctica espiritual para
entender el vacío.
De acuerdo al budismo tántrico, la
emisión de fluidos regenerativos es una pérdida de energía vital, misma
que debe ser controlada y, eventualmente, regresada a otras partes del
cuerpo.
“Cuando practicas las etapas avanzadas
de la etapa completa, poder tener contacto sexual sin liberar semen es
algo necesario” –Dalai Lama (Archivos Berzin)
“Para los budistas, el intercambio
sexual puede ser usado en el camino espiritual porque, si el practicante
tiene una firme compasión y sabiduría, genera una concentración extrema
en la conciencia. Su propósito es manifestar y prolongar niveles más
profundos de la mente para poner sus poderes a trabajar en el
fortalecimiento de la comprensión del vacío. De otra manera, la relación
sexual no tiene nada que ver con el cultivo espiritual. Cuando una
persona ha alcanzado un alto nivel de práctica en la motivación y la
sabiduría, entonces la sola unión de los dos órganos sexuales no le
resta nada al mantenimiento del comportamiento puro de esa persona.” […]
Mediante técnicas especiales de concentración durante el sexo, los
practicantes competentes pueden prolongar estados muy profundos, sutiles
y poderosos, y ponerlos a funcionar para comprender el vacío. Sin
embargo, si te involucras en una relación sexual dentro de un contexto
mental ordinario, no existe beneficio”. –Dalai Lama, How to Practice, Way to a Meaningful Life
“De hecho […] el órgano sexual es
utilizado, pero el movimiento de energía que está teniendo lugar es, al
final, enteramente controlado. Nunca se debe dejar que la energía se
salga. Esta energía debe ser controlada y eventualmente regresada a
otras partes del cuerpo. Y aquí podemos ver que hay una suerte de
conexión especial con el celibato”. –Dalai Lama, The Good Heart
”Hay una gran diferencia entre el
movimiento de fluidos regenerativos de dos individuos involucrados en
una relación sexual ordinaria en contraste con una relación sexual entre
un yogui y una yoguini altamente realizados […]. En principio, la
diferencia general entre los dos tipos de actos sexuales es el control
del flujo de fluidos regenerativos. Los practicantes de tantra deben
tener control sobre el fluir de los fluidos, y aquellos que están muy
experimentados incluso pueden revertir la dirección del flujo, aun
cuando ha llegado a la punta de los genitales. Los practicantes menos
experimentados tienen que revertir la dirección del flujo desde un nivel
más alto. Si los fluidos descienden demasiado, es mucho más difícil
controlarlos”. –Dalai Lama, Sleeping, Dreaming, and Dying
Aunque esté usando el término común
“clímax sexual”, éste no implica el acto sexual ordinario. La referencia
aquí es poder experimentar la unión con un consorte del sexo opuesto
mediante la cual los elementos en la corona se derritan, y el proceso
también sea revertido por medio de la meditación. Un prerrequisito para
tal práctica es que seas capaz de protegerte de cometer el error de
emitir semen. De acuerdo a la explicación del Tantra Kalachakra en
particular, tal emisión es muy dañina para tu práctica. Entonces, ya que
no debes experimentar tal emisión ni siquiera en sueños, los tantras
describen distintas técnicas para vencer esta falla”. –Dalai Lama
Una noche, algunas dakikis (deidades
femeninas) se juntaron en la habitación de Birwapa en el monasterio.
Otros monjes escucharon voces femeninas a través de las paredes y al día
siguiente, en la reunión en el gran salón, el disciplinario principal
expulsó a Birwapa del monasterio. Birwapa se fue voluntariamente,
reconociendo que había llegado el momento de practicar la “unión” y
desarrollar el Gran Gozo que penetra el vacío por medio de la confianza
en un consorte externo”. –Ian Baker, El templo secreto del Dalai Lama