#10 Los padres son quienes controlan los alimentos
Tú eres quien decide qué alimentos comprar y cuándo servirlos. Aunque tus hijos se quejen y te pidan alimentos no muy saludables, mamá y papá deciden qué comprar y cuándo se debe comer.
#9 A partir de lo que ofreces, ellos pueden decidir qué quieren comer
No es que se les des tanta libertad. Piensa que si has cumplido con el paso anterior, en la nevera y en el armario sólo habrán cosas naturales así que no hay problema que elijan entre algunas opciones.
#8 No sigas con el consejo de abuela: “Dejar el plato limpio”
Lo mejor es que les enseñes a tus hijos a comer hasta que estén satisfechos y no obligarlos a que se terminen hasta el último bocado. Deben aprender a parar cuando sienten saciedad.
#7 Comienza cuando son pequeños
Las preferencias alimentarias se desarrollan a muy temprana edad, es por eso que desde bebés debes servir alimentos sanos, así tus hijos los comerán con naturalidad. Dales a probar varias veces un alimento nuevo, aunque sea de a un bocado por vez.
#6 Experimenta en el menú
Muchas veces los grandes pensamos que a los chicos siempre les gusta comer lo mismo: comida chatarra. Una buena idea es que cuando salgan a comer afuera dejes que pidan nuevos platos para que experimenten nuevos sabores, y salgan de la comida chatarra.
#5 Cuidado con las bebidas
Siempre el agua, jugos naturales son la mejor opción. Las bebidas endulzadas pueden ocasionar múltiples problemas en la salud de tus pequeños. Si los acostumbras de pequeños, verás que tomarán agua o leche naturalmente y no se volverán locos por las gaseosas, por ejemplo.
#4 Pon a los dulces en su lugar
No hagas que tus hijos coman todas sus verduras para poder obtener un dulce. Dale a los dulces el lugar que deben tener: ser ocasionales. No olvides que el mejor postre puede ser una rica fruta.
#3 La comida no es amor
No recompenses a tus hijos con comida. Los abrazos, los mimos, los besos y las palabras de aliento son mucho mejores que ir a comer una hamburguesa si se portó bien en el control médico. No los acostumbres a recibir premios comestibles.
#2 Sé el mejor ejemplo
Los niños imitan todo lo que ven de sus padres y aprenden de sus acciones. Es por eso que es tan necesario que los adultos de la casa también coman de forma nutritiva, con bocadillos sanos, comiendo sentados a la mesa y sin saltearse comidas.
#1 Limita el tiempo de computadora y televisor
Los niños cuyo tiempo frente a la computadora y televisor es reducido pasan más tiempo haciendo cosas “activas”, por lo que reducen su grasa corporal al tiempo que no se la pasan comiendo bocadillos.