Monday, January 19, 2015

Viaje hacia el proceso digestivo





La digestión, el proceso fundamental por el cual nuestro cuerpo recibe los nutrientes es uno de los componentes más importantes para disfrutar de salud a plenitud.

La dieta más saludable no hará una diferencia si la digestión está fuera de sintonía. Estrés, sueño y actividad son factores todos ellos que desempeñan un papel en el desarrollo óptimo del proceso digestivo.
             
Cada célula de cualquier órgano depende del sistema digestivo para obtener los nutrientes que necesita para mantenerse en funcionamiento.

La digestión comienza en el cerebro. La vista y el olor de la comida activa las glándulas salivales para comenzar a producir saliva.

Como cultura estamos demasiado estresados, manteniendo un estado crónico de lucha y/o fuga, una función del sistema simpático que controla la mayoría de nuestros órganos internos.

Para digerir la comida necesitamos estar en un estado de relajamiento mínimo, es decir, cero estrés.

En otras palabras, es importante relajarnos antes de las comidas. Sentarse a comer, eliminar distracciones, tomar unas cuantas respiraciones profundas y ser conscientes de que nos estamos nutriendo.

El procesamiento mecánico y químico de los alimentos comienza en la boca. Con los dientes procesando físicamente los alimentos en partes más pequeñas, proceso que conocemos como masticación.

Las glándulas salivales secretan saliva para humedecer el alimento y ayudar con la deglución. Sin masticar correctamente, el cerebro no entiende el mensaje para activar los procesos digestivos adecuados y los alimentos no se descomponen lo suficiente de tal forma que se aumenta la carga de trabajo en el estómago.

Se puede reducir dicha carga al masticar los alimentos lo menos unas 20 a 30 veces por mordedura.

Una vez que los alimentos bajan por el esófago, llegan al estómago para continuar la descomposición mecánica de los alimentos.


Viaje hacia el proceso digestivo 


Ácido clorhídrico (HCl) se excreta en el estómago a un pH de 0,8 de acidez, es decir, casi puro. Un porcentaje muy elevado de personas producen muy poco ácido clorhídrico.

Si no produces el suficiente ácido clorhídrico, tu cuerpo crea un ambiente favorable para los organismos como levadura, bacterias, virus y parásitos, que al prosperar, causan estragos en el tracto gastrointestinal.

Factores como el estrés, consumo excesivo de carbohidratos, la deficiencia de nutrientes, alergias y exceso de alcohol pueden inhibir la producción de ácido clorhídrico.

La digestión continúa en el intestino delgado que tiene una doble función como un órgano digestivo y una glándula. Las paredes intestinales secretan moco al mismo tiempo que librea dos hormonas en el torrente sanguíneo: secretina y colecistoquinina (CCK).

La secretina estimula el páncreas para liberar el bicarbonato y el jugo pancreático y la colecistoquinina estimula la vesícula biliar para liberar la bilis.

Las dietas bajas en grasas no desencadenan la liberación de la bilis y dietas llenas de grasa mala pueden causar bilis viscosa.

La vesícula biliar hace intentos por contraerse pero es incapaz de liberar la bilis viscosa. Dicha bilis no provoca la absorción de las grasas.

Las proteínas no digeridas pueden impactar en los pelillos del intestino llamado vellosidades y microvellosidades.

El revestimiento intestinal se vuelve permeable y pierde la capacidad de filtrar lo que debe dejar pasar, en otras palabras, una coladera; enfermedad conocida como el síndrome de intestino permeable.

Proteínas y grasas nutritivas pasan sin haber sido procesadas debidamente a través de las paredes del intestino, desbordando al sistema inmunológico. Un alimento nutritivo se convierte ahora en un atacante de nuestro propio sistema inmunológico.

Los restos de la digestión se tratan en el intestino grueso. En el caso de disfunción, que puede deberse por alimentos mal digeridos llenos de parásitos, microorganismos y grasas no digeridas, pueden obstruir el colon y atascarlo, causando disbiosis que altera la flora saludable.

Sin flora saludable, ácido butírico no se produce debilitando las células del colon. Esto deja al colon sujeto a inflamación, divertículos y pérdida del tono.

Enfermedades como IBS, Crohn, colitis, celiaca son un resultado directo.

El colon además se encarga de eliminar los restos fecal, previo la extracción del agua, proceso que puede desarrollarse de forma simple o ser todo un problema en caso de estreñimiento, hemorroides o fisuras anales.

Como puedes ver, son muchos los problemas pueden ocurrir en el viaje digestivo, pero podemos ayudar a nuestros cuerpos a digerir mejor los alimentos simplemente comiendo conscientemente, masticando más y comiendo alimentos enteros provistas por la naturaleza.

Es una proceso sorprendente y difícil, pero podemos hacer nuestra parte, ya que es nuestra propia salud la que esta en juego y por supuesto que nos importa

Tu salud es un tesoro ¿lo cuidas con esmero?

Jacobo

Fuente: http://salud.facilisimo.com/blogs/general/viaje-hacia-el-proceso-digestivo_1338268.html