¿Has pensado alguna vez que podrías
estar defecando mal? Muchos expertos dicen que la civilización
occidental no ha estado evacuando de manera correcta por generaciones.
Los científicos de Stanford University Pelvic Floor Clinic
explican que el cuerpo humano está diseñado para ponerse en cuclillas,
no sentarse. Si revisas la historia de los hábitos en el baño, verás por
qué esta afirmación tiene sentido. Estudios han demostrado que la
inadecuada eliminación fecal causa apendicitis, cáncer de colon,
enfermedad inflamatoria intestinal, hernias, diverticulosis, y
hemorroides.
Muchas otras condiciones de salud también están asociadas con una eliminación fecal inadecuada.
En
el 2003, un grupo de científicos llevó a cabo un estudio en el que
participaron 28 personas. Los participantes tenían que defecar en tres
posiciones: sentados en un inodoro bajo, sentado en un baño alto y en
cuclillas. Los científicos coincidieron en que para los participantes
que defecaron en cuclillas era más fácil y tomaron un minuto menos.
“Definitivamente
hay algo de sentido fisiológico a ponerse en cuclillas”, explicó el
gastroenterólogo Anish Sheth, MD, co-autor de los libros What´s Your Poo Telling You? y What´s My Pee Telling Me? “En palabras simples, se endereza el colon.”
La gente de Everyday Health
dice, “cuando estamos de pie, el colon (donde se almacenan los
residuos) es empujado contra el músculo puborrectal, que mantiene la
continencia fecal hasta que sea hora de ir al baño. Sentarse relaja sólo
parcialmente ese músculo. De cuclillas se relaja totalmente,
esencialmente enderezando el colon. Eso, a su vez, facilita el proceso
de eliminación fecal”.
Bocku´s Gastroenterology,
un texto médico estándar de 1964, también estuvo de acuerdo sobre el
tema: “La postura ideal para la defecación es la posición en cuclillas,
con los muslos en el abdomen.” Y ahora ves por qué nuestros antepasados
defecaban todos los días hasta mediados del siglo IXX.
Defecar en cuclillas – Beneficios para la salud
- Promueve una eliminación más rápida y más fácil
– Previene el estancamiento de residuos que aumenta el riesgo de cáncer de colon
– Evita que los residuos entren y contaminen el intestino delgado
– Protege el suelo pélvico y los nervios considerados responsables de la salud de la próstata, control de la vejiga y sexualidad
– Protege los nervios responsables del control de la próstata, vejiga y útero, evitando cualquier estiramiento y daños
– Ayuda a las mujeres embarazadas con un parto natural. Evita la presión sobre el útero que aparece al usar el inodoro
– Previene el estancamiento de residuos que aumenta el riesgo de cáncer de colon
– Evita que los residuos entren y contaminen el intestino delgado
– Protege el suelo pélvico y los nervios considerados responsables de la salud de la próstata, control de la vejiga y sexualidad
– Protege los nervios responsables del control de la próstata, vejiga y útero, evitando cualquier estiramiento y daños
– Ayuda a las mujeres embarazadas con un parto natural. Evita la presión sobre el útero que aparece al usar el inodoro
Fuente (traducido al español por EmpoderaSalud): http://www.healthyfoodhouse.com/what-is-the-proper-way-to-poop/
Imagen: Squatty Potty
Imagen: Squatty Potty