¿En realidad cuánto control tienes sobre
tu propia vida en general, y particularmente en tu salud? Estas
preguntas han intrigado a muchos desde el principio del tiempo.
Ahora,
la ciencia emergente sobre la epigenética está ofreciendo algunas
respuestas que ponen a tu alcance el verdadero control.
Según algunos científicos, cambiar tu salud puede ser tan “simple” como cambiar tus pensamientos y creencias.
“Lo
contrario a lo que muchas personas están creyendo, si se pone mucho
énfasis en los genes se puede determinar que el comportamiento humano no
es más que la teoría y la doctrina,” dice Konstantin Eriksen“Somos libres de tomar decisiones que afectan nuestras vidas y las de los demás… Nuestras creencias pueden
cambiar nuestra biología. Tenemos el poder de sanarnos nosotros mismos,
aumentar nuestros sentimientos de autoestima y mejorar nuestro estado
emocional.”
La Epigenética Destruye “El Dogma Central”
Eriksen
habla de algo que se llama “El Dogma Central” de la biología molecular,
que indica que la información biológica se transfiere de forma
secuencial y en una sola dirección (del ADN a las proteínas ARN).
La
ramificación de creerse el dogma central es que te hace creer en el
determinismo absoluto, que te deja completamente impotente para hacer
algo sobre la salud de tu cuerpo; todo está impulsado por tu código
genético, con el que naciste.
Sin
embargo, los científicos han destrozado completamente este dogma y han
probado que es falso. De hecho, tienes una enorme cantidad de control
sobre cómo tus características genéticas se expresan, desde la forma en
que piensas hasta lo que comes y el entorno en el que vives.
Tal
vez recuerdas el Proyecto del Genoma Humano, que fue lanzado en 1990 y
terminado en el 2003. La misión era ubicar todos los genes humanos y sus
interacciones, lo que posteriormente serviría como base para curar
prácticamente cualquier enfermedad. Por desgracia, no sólo nos dimos
cuenta que el cuerpo humano está compuesto de muchos menos genes de los
que habíamos pensado anteriormente, también descubrieron que estos genes
no funcionan como se pensaba anteriormente.
En
el artículo destacado, Eriksen menciona los experimentos de John
Cairns, un biólogo molecular británico quien en 1988 presentó evidencia
convincente de que nuestras respuestas a nuestro entorno determinan la expresión de nuestros genes. Un pensamiento radical, a ciencia cierta, pero que ha demostrado ser cierto en múltiples ocasiones desde ese tiempo.
Eriksen escribe:
“Cairns
tomó bacterias cuyos genes no les permitían producir lactasa, la enzima
necesaria para digerir el azúcar de la leche y los colocó en platos de
Petri, donde el único alimento presente fue la lactasa. Para su
sorpresa, a los pocos días, todos los platos de petri estaban repletos
de bacterias y estaban comiendo lactosa. El ADN bacteriano había
cambiado en respuesta a su entorno. Este experimento se ha repetido es
muchas ocasiones y no han encontrado una mejor explicación que este
hecho evidente–que incluso los organismos primitivos pueden evolucionar
conscientemente.
Así, la
información fluye en ambas direcciones, del ADN a las proteínas y de las
proteínas al ADN, lo que contradice al “dogma central.” Los genes pueden ser activados y desactivados por señales del medio ambiente.
La conciencia de la célula se encuentra dentro de la membrana de la
célula. Todas y cada célula en nuestro cuerpo tiene un tipo de
conciencia. Los genes cambian su expresión en función de lo que está
sucediendo fuera de nuestras células e incluso fuera de nuestros
cuerpos.”
Tus Emociones Regulan Tu Expresión Genética
Como
si los genes que cambiaran su expresión en respuesta a los factores
ambientales como los nutrientes no fueran suficiente, otros
investigadores han demostrado que este “ambiente” al que responden tus
genes, también incluye tus pensamientos conscientes, emociones y
creencias inconscientes. El biólogo celular Bruce Lipton, PhD., es un de
las principales autoridades sobre cómo las emociones pueden regular la
expresión genética, que explica detalladamente en sus increíbles libros The Biology of Belief y Spontaneous Evolution.
De
hecho la ciencia nos ha llevado mucho más allá de la física newtoniana,
que dice que vives en un universo mecánico. Según esta creencia, tu
cuerpo es sólo una máquina biológica, por lo tanto al modificar las
partes de la máquina, podrías modificar tu salud. También, como una
máquina biológica, se cree que tu cuerpo responde a las “cosas” físicas
como las sustancias químicas activas que se encuentran en los
medicamentos, y al adaptarse a los medicamentos que modifican tu
máquina, los doctores pueden modificar y controlar tu salud. Sin
embargo, con la llegada de la física cuántica, los científicos han
encontrado las fallas de la física newtoniana, ya que la física cuántica
nos muestra que el reino inmaterial invisible en realidad es mucho más
importante que el reino material. De hecho, tus pensamientos pueden dar
forma a tu entorno mucho más que la materia física.
Según
el Dr. Lipton, el verdadero secreto de la vida no se encuentra en tu
ADN, sino más bien dentro de los mecanismos de tu membrana celular.
Cada
membrana de la célula tiene receptores que captan diferentes señales
ambientales y este mecanismo controla la “lectura” de los genes dentro
de las células. Tus células pueden optar por leer o no el mapa genético
dependiendo de las señales que se recibe del medio ambiente. Por lo
tanto un “programa de cáncer” en tu ADN no significa automáticamente que
estás destinado a tener cáncer. Lejos de ello. Esta información
genética no tiene que ser expresada…
Todo
esto significa que no estás controlado por tu composición genética.
Sino más bien por tu lectura genética (que es la que activa o desactiva a
los genes) se determina principalmente por tus pensamientos, actitudes y
percepciones.
El principal problema
de creer el mito de que los genes controlan tu vida es que te conviertes
en una víctima de tu herencia. Dado a que no puedes cambiar tus genes,
esto en esencia significa que tu vida está predeterminada, y por lo
tanto tienes muy poco control sobre tu salud. Con un poco de suerte, la
medicina moderna será capaz de encontrar el gen responsable y podrá
alterarlo o crear otro tipo de medicamento para modificar la química de
tu cuerpo, pero aparte de eso, no tendrás suerte… Sin embargo, la nueva
ciencia, revela que tus percepciones controlan tu biología, y esto es lo
que te hace tener el control, ya que si es posible cambiar tus
percepciones, puedes dar forma y controlar tu propia lectura genética.
Esta
nueva ciencia de hecho también revela que eres una extensión de tu
entorno, que incluye todo, desde tus pensamientos y creencias hasta
exposiciones tóxicas y la exposición a la luz solar, ejercicio y por
supuesto, todo lo que pones dentro y fuera de tu cuerpo. Como lo explica
el Dr. Lipton con mucho aprecio, la nueva biología te mueve del
victimismo y te lleva al dominio sobre tu propia salud.
Es una confirmación suprema de mi frase favorita: “Puedes Tomar Control de tu Salud.”
Cómo la Nutrición Afecta la Expresión Genética
Hace
dos años, un estudio realizado por el Instituto Linus Pauling de la
Universidad del Estado de Oregon fue presentado en la convención anual
de Biología Experimental. El estudio demostró como “las modificaciones
de histonas” pueden afectar la expresión de muchas enfermedades
degenerativas, desde el cáncer, enfermedades cardiacas hasta problemas
bipolares e incluso el mismo envejecimiento. Según Vara Dashwood,
profesora de toxicología molecular y ambiental y jefa del Programa de
Cáncer de Quimio protección en el Instituto Linus Pauling, citada en un
comunicado de prensa:
“Creemos
que muchas enfermedades que tienen como característica una expresión
génica anormal, se pueden vincular a la manera en que el ADN está
formado y a las acciones de las enzimas como la histona deacetilasa o
HDAC. Tan recientemente como hace 10 años no sabíamos casi nada sobre la
desregulación de HDAC en el cáncer u otras enfermedades, pero ahora es
una de las áreas más prometedoras de la investigación que se relacionan
con la salud.”
En pocas
palabras, todos tenemos genes que suprimen los tumores, y estos genes
son capaces de detener las células de cáncer. Estos genes están
presentes en todas las células del cuerpo, pero también las proteínas
llamadas “histonas.” Como lo explica el Dr. Jean-Pierre Issa del Centro
del Cáncer MD Anderson, las histonas pueden “abrazar” apretadamente al
ADN al grado que lo “ocultan de la vista de la célula.” Si un gen
supresor de tumor está oculto, no podrá utilizarse y de esta manera,
demasiada histona “apagará” a estos supresores de cáncer y permitirá que
las células cancerosas proliferen.
Ahora
aquí es donde entra en juego la epigenética… ciertos alimentos, como el
brócoli y otros vegetales crucíferos, el ajo y la cebolla contienen
sustancias que actúan como inhibidores de las histonas, que
esencialmente bloquearán la histona, lo que haría que tus genes
supresores de tumores se activen y luchen contra el cáncer. Al consumir
regularmente estos alimentos, estás apoyando de forma natural la
capacidad de tu cuerpo para combatir los tumores.
Algunos
oncólogos alternativos también se enfocan directamente en el mecanismo
epigenético, como el Dr. Nicolás González, que utiliza un enfoque de
tres vertientes para el cáncer basados principalmente en la nutrición y
la desintoxicación, y el Dr. Stanislaw Burzynski, que trata el cáncer
enfocado en los genes. Su tratamiento utiliza péptidos no tóxicos y
aminoácidos, conocidos como antineoplastones, que actúan como
interruptores genéticos que “activan” los genes supresores de tumores.
Un Estilo de Vida Saludable Apoya la Expresión Genética Saludable
Así que la buena noticia es que tienes el control de tus genes…
Puedes alterarlos regularmente, dependiendo de los alimentos que comes,
aire que respiras y los pensamientos que tienes. Es el medio ambiente y
estilo de vida los que determinan tu tendencia a expresar la enfermedad
y este nuevo hallazgo está listo para hacer grandes cambios en
prevención de enfermedades futuras– incluyendo un día para educar a las
personas sobre cómo combatir la enfermedad a nivel epigenético. Cuando
se presenta una enfermedad, la solución, de acuerdo con la terapia
epigenética, es simplemente “recordarle” a tus células afectadas
(cambiar sus instrucciones del medio ambiente) su función saludable,
para que puedan volver a ser células normales en lugar de células
enfermas.
Puedes comenzar a hacer
esto por tu propia cuenta, mucho antes de que manifiestes una
enfermedad. Al llevar una vida sana, con una nutrición de alta calidad,
ejercicio, exposición limitada a las toxinas y una actitud mental
positiva, con esto animarás a que genes expresen comportamientos
positivos que combatirán las enfermedades.
De
esto es lo que se trata la medicina preventiva. No se trata de tomar
cualquier nutriente en particular como un suplemento para curar una
“parte” específica de tu maquinaria biológica… Entre más personas estén
dispuestas a aceptar esta simple verdad, más saludables serán todas
estas personas.
También vale la pena señalar que los efectos epigenéticos comienzan antes del nacimiento.
La
investigación epigenética del 2009 mostró que los fetos de ratas que
recibieron pobre nutrición en el útero estuvieron preparados
genéticamente para llevar un entorno de nutrición deficiente. Como
resultado de esta adaptación genética, las ratas fueron propensas a ser
más pequeñas. También estuvieron en mayor riesgo de sufrir una serie de
problemas de salud durante toda su vida, como la diabetes, retraso del
crecimiento, enfermedades cardiovasculares, obesidad y retrasos del
desarrollo neurológico. Una vez más, mientras que algunas personas han
tratado de culpar a estas “predisposiciones” en los genes malos, el
factor clave es la nutrición, es decir, el entorno celular.
Si
estás listo para abordar tus hábitos alimenticios, échale un vistazo a
mi Plan de Nutrición, que te dará los consejos y las herramientas para
llevar una alimentación saludable, como tratar con el estrés y como
llevar un estilo de vida que apoye tu salud epigenética.
También
puedes prender y apagar tus genes con tus emociones. La mayoría de las
personas portan cicatrices emocionales; traumas que pueden afectar
negativamente a la salud. El uso de técnicas como la psicología
energética, pueden ayudar a corregir el trauma y ayudar a regular la
expresión genética. Mi técnica favorita para esto es la Técnica de
Liberación Emocional (EFT) pero hay muchas otras más. Elige la que más
te atraiga y si no sientes ningún beneficio, prueba con otra, hasta que
encuentres la que mejor que te funcione.
Por favor, recuerda que “Puedes Tomar Control de tu Salud”.
Fuente:http://articulos.mercola.com/sitios/articulos/archivo/2015/01/10/la-epigenetica-vs-el-determinismo.aspx?e_cid=20150110_ESPANL_art_1&utm_source=espanl&utm_medium=email&utm_content=art1&utm_campaign=20150110&et_cid=DM64339&et_rid=799940094 También puedes encontrar el artículo original en inglés en http://articles.mercola.com/sites/articles/archive/2012/04/11/epigenetic-vs-determinism.aspx