Del Latín Fibra, simbólicamente significa “vínculos familiares”. Mio – del Griego- músculo y algia-dolor.
La
fibromialgia está considerada un diagnostico controvertido y algunos
autores afirman que no debe considerarse como una enfermedad debido
entre otras razones, a la falta de anormalidades en el examen físico, en
los exámenes de laboratorio objetivos o estudios de imágenes médicas
para confirmar el diagnostico.
Se
denomina fibromialgia a un grupo de síntomas y trastornos
musculoesqueléticos poco entendidos, que se caracteriza fundamentalmente
por fatiga extrema, dolor persistente, rigidez de intensidad variable
de los músculos, tendones y un amplio rango de otros síntomas
psicológicos, como dificultades para dormir, rigidez matutina, dolores
de cabeza y problemas con el pensamiento y la memoria, algunas veces
llamado “lagunas mentales” que suelen impedir el funcionamiento
rutinario de las personas. Es un trastorno “no contagioso” presente en
aproximadamente entre el 3 y el 6 por ciento de las mujeres jóvenes,
comúnmente entre los 20 y los 50 años de edad.
Una cosa a
destacar, debido a que es un síntoma poco entendido, los enfermos de
fibromialgia sienten que los demás no les creen porque el dolor no se
ve. Es un sufrimiento interior, es la enfermedad de las fibras
familiares.
Los
afectados son personas excesivamente serviciales y necesitan el
dinamismo de la familia, a la que por otra parte suele culpar de su
falta de actitud.
La fibromialgia se produce cuando tenemos bloqueos para convertir los impulsos interiores en actividades exteriores: “Conflicto de Desvalorización”,
"con lo que hago o dejo de hacer”. “Si me muevo a un lado, no estoy
bien; si me muevo hacia el otro, tampoco estoy bien, por lo tanto, no me
muevo”.
Asimismo en la fibromialgia existe un conflicto denominado “Contacto Impuesto”: tener que asumir, hacer o estar con una persona o situación determinada.
Se puede considerar que el conflicto principal que se esconde en las personas que padecen fibromialgia es lo que se denomina un “Conflicto
de Dirección”: Pánico a equivocarse de dirección. Conflicto por haber
elegido la mala dirección, por estar sobre una pista mala, sea real,
imaginaria o simbólica. Desvalorización por no encontrar el buen camino.
La dirección que estoy tomando en mi vida no me satisface. “¿Qué estoy
haciendo aquí?” “Estoy perdido, fuera del rebaño entonces…cuando alguien
se pierde lo mejor es quedarse quieto”. Afecta a la corteza suprarrenal, que deja de producir el cortisol.
Otro
conflicto importante que puede existir detrás de una fibromialgia es el
“miedo a la muerte”, pero no a la muerte física, sino a la muerte de su
propia “identidad” (sentirse con falta de pertenecer a la familia, real o
a la que ella se imagina, o sentir que la familia no hace lo que ella
quiere).
Del mismo modo puede existir un conflicto denominado La Doble Obligación: “Voy hacia la persona que quiero pero al mismo tiempo es mi verdugo”.
Aunque en
muchas ocasiones, consideramos a los demás responsables de nuestros
bloqueos, estos no hacen más que reflejar nuestro miedo a resolver un
asunto, miedo a actuar, a avanzar, a afirmar nuestro propio punto de
vista, en definitiva, miedo a hacer lo que uno cree que debe hacer.
Joman Romero, autor del libro “Conocernos. ¿Qué nos quiere decir el cuerpo con la enfermedad?”