Las resolvinas, unos lípidos que se producen de forma natural derivados de los ácidos grasos omega-3, podrían dar lugar a una nueva clase de analgésicos para tratar el dolor inflamatorio, según revela un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale (Estados Unidos) que se publica en la revista Nature Medicine.
El dolor inflamatorio, como el artrítico o el postoperatorio, es desencadenado por la lesión de los tejidos, que conduce a la liberación de componentes que aumentan la inflamación y actúan en la médula espinal produciendo dolor persistente. Los autores del trabajo, dirigidos por Ru-Rong, proponen que las resolvinas podrían ser eficaces como analgésicos en estos casos.Según sus estudios, las resolvinas RvE1 y RvD1, que se producen de forma natural a partir de ciertos ácidos grasos omega 3, reducen los síntomas de dolor inflamatorio cuando se administraban a ratones.
Además de estos efectos antiinflamatorios, los autores descubrieron que RvE1 actúa en la médula espinal para prevenir la activación neuronal persistente que suele causar el dolor crónico. Y todo sin alteraciones en la sensibilidad normal al dolor.