Al parecer, lo que los románticos empedernidos defendieron desde siempre: el amor, realmente es bueno para la salud.
“No ser amado es una simple desventura. La verdadera desgracia es no saber amar”, dijo el escritor francés Albert Camus.
Lo cierto es que saber amar no sólo es una fortuna, sino que puede mejorar la salud del corazón. Desde siempre ha existido una conexión entre el amor y el corazón, de la cual poco se conoce. Sin embargo, hoy podrás saber más acerca de esta mágica relación.
Estar con seres queridos reduce la presión arterial
Un estudio publicado en la revista Psychosomatic Medicine encontró que las personas que pasaron tiempo con sus parejas experimentaron una disminución de la presión arterial. Los investigadores relacionaron la disminución de la presión arterial con el apoyo emocional.
Mirar a un ser amado puede ser una forma de ejercicio
Cuando se mira a una persona con la cual hay “química” o amor, el cerebro libera hormonas comodopamina, adrenalina y noradrenalina, que hacen que el corazón lata más rápido y más fuerte.
Estos latidos más fuertes ayudan a bombear sangre de manera más eficiente, algo semejante a lo que ocurre cuando se practica ejercicio aeróbico. Claro que esto ocurre en menor medida, por lo que sigue siendo importante hacer ejercicio a diario.
Los abrazos llegan al corazón
Cuando se abraza a alguien, el cuerpo libera oxitocina, una hormona que provoca sensación de bienestar y que ayuda a combatir el estrés y a disminuir la presión arterial, según un estudio de la Universidad de Carolina del Norte.
La risa hace que la sangre fluya mejor
Una investigación reciente de la Universidad de Maryland encontró un vínculo entre el estrés y el estrechamiento de los vasos sanguíneos. Sin embargo, con la risa ocurrió lo opuesto, es decir, esta ayudó a expandir los vasos sanguíneos.
“La magnitud del cambio que vimos en el endotelio [revestimiento de los vasos sanguíneos] después de reír era consistente y similar al beneficio que podríamos ver con el ejercicio aeróbico o el uso de estatinas“, explicó Michael Miller, profesor de medicina de la Universidad de Maryland.
Escribir cartas de amor puede reducir el colesterol
Dos ensayos clínicos publicados en Investigación de la Comunicación Humana, analizó a estudiantes universitarios sanos que pasaron 20 minutos escribiendo una carta a sus seres queridos. Ellos experimentaron una disminución del colesterol total y los estudiantes del grupo de control que no escribieron cartas no experimentaron tal disminución.
Una actitud positiva reduce el riesgo de padecer un ataque cardiaco
Una investigación publicada en la revista European Heart Journal, demuestra que tener una actitud positiva ante la vida puede proteger contra enfermedades cardiovasculares.
Un grupo de investigadores definió “afecto positivo” como sensación de alegría, felicidad, emoción, entusiasmo y alegría. Luego ellos midieron el nivel de afecto positivo en un grupo de participantes (mediante una entrevista personal) y chequearon sus registros de salud durante los siguientes 10 años.
Las personas que tenían el puntaje más alto de “afecto positivo” tuvieron un riesgo 22% menor de padecer enfermedad cardiovascular y fueron menos propensos a fumar, a tener niveles de colesterol alto y a tener problemas de ansiedad.
Tomarse de la mano calma la ansiedad
Según un estudio publicado en Psychological Science, tomarle la mano a un ser amado tiene un efecto calmante.
Los investigadores reclutaron a parejas casadas y realizaron una resonancia magnética en las mujeres. Pudieron comprobar que cuando tomaban de la mano a sus maridos, las mujeres experimentaban una reducción de la actividad cerebral asociada con la previsión del dolor.