Algunos buscan la felicidad en el dinero, otros en la seguridad de un buen trabajo, mientras que varias personas la asocian a disfrutar de la vida con los seres más queridos. Quizás uno de los anhelos, que más mueve a los seres humanos es alcanzar ese estado de plenitud interior llamado felicidad.
La salud no es sólo la ausencia de enfermedad sino también, según la Organización Mundial de la Salud, disfrutar del mayor grado posible de bienestar físico, psicológico y social. En la edad adulta las prioridades cambian: la salud y mantener la calidad de vida se convierte en una preocupación frecuente. Cuidar la salud es importante, pero lo cierto es que la combinación de bienestar físico y emocional es determinante para tener una existencia más larga y placentera.
Equilibrio y bienestar
Mientras que la salud física tiene que ver con el cuidado del cuerpo y sus funciones, la salud mental es la que se refiere a la manera en la que manejamos nuestra vida diaria; es decir que tiene que ver con con nuestras relaciones interpersonales, nuestros deseos, anhelos, habilidades, ideales, sentimientos y valores.
Por otra parte, la salud emocional es la que garantiza que encaucemos de forma responsable nuestros sentimientos, pensamientos y comportamientos, por lo que tiene que ver profundamente con nuestro autoestima y capacidad para enfrentar las situaciones difíciles.
Lograr un estado de bienestar, armonía y equilibrio físico, mental y emocional es la clave para lograr la tan ansiada felicidad; a continuación algunos consejos para lograrlo.
1.-Comparta intereses
Practicar una actividad que sea placentera para usted, le ayudará a mantener el entusiasmo y las ganas de vivir y es también una excelente manera de conocer nuevas personas, de fortalecer su autoestima y de relacionarse socialmente. Formar parte de un grupo, cuyos miembros compartan intereses en común ayuda a fortalecer el sentimiento de pertenencia, que es vital para evitar la depresión.
2.- Quiérase
Comer sanamente, descansar los suficiente, hacer ejercicio, estimular los buenos pensamientos son acciones fáciles de realizar para mantenerse saludable, pero también son formas de demostrarse amor a usted mismo. En vez de autocriticarse, observe y cultive los talentos que lo hacen único.
3.- Viva el presente
La vida es hoy y ahora. No se preocupe de forma excesiva por los errores que cometió en el pasado o por lo que le depara el futuro. Al contrario, disfrute cada momento de la vida con entusiasmo, ésta es una de las formas más efectivas y duraderas de mantener la paz espiritual y emocional.