Siéntete pleno y rebosante de amor.
Recuerda que una vez has alcanzado ese estado de amor, nada ni nadie podrá
quitarte más energía de la que puedas recuperar. James Redfield
El chi, la energía vital, da vida a todas
las personas, todos los lugares y todas las cosas. Este es la razón por la que
el Feng Shui se centra en aumentar el chi en nosotros y en nuestro hogar.
Organizamos nuestros muebles y pertenencias para promover un buen flujo de
energía, vivir con lo que nos gusta y escoger los diseños que sean seguros y
cómodos. Simplificamos nuestro entorno para fomentar nuestra expresión creativa
y la claridad de nuestras metas.
Además de las mejoras ambientales, recuerda
cuidar tu equilibrio interno. A continuación expongo 2 sencillos ejercicios de
meditación para reunir y recargar el chi.
El primero se puede practicar en cualquier
momento. El segundo requiere un lugar especial.
Ejercicio de la esfera de chi
Este valioso ejercicio para recargar el chi
se puede practicar en cualquier lugar y momento.
Siéntate o estírate en silencio y respira
despacio y profundamente.
Visualiza una brillante esfera de energía
dorada, como un Sol, que rodea tu cuerpo. Esta es tu esfera de chi. Relájate y
visualiza ésta esfera irradiando fuerza vital hacia todas las partes de tu
cuerpo. Aspira hondo y exhala todas las tensiones. Aspira y visualiza tu esfera
de chi llenando y recargando hasta el último rincón de tu cuerpo, mente y
espíritu con energía rejuvenecedora y sanadora. Espira a fondo y vuelve a aspirar,
envía la energía vital a las partes de tu cuerpo -o de tu vida- que creas que
la necesitan, y llena todo lugar doloroso de luz y energía. Exhala todo aquello
de lo que desees desprenderte. Continúa respirando profundamente y nutre todo
tu ser con la energía sanadora de tu esfera de chi.
Puedes recargar tu chi en cualquier momento
utilizando ésta sencilla técnica. Es el antídoto perfecto para el estrés y te
rejuvenecerá siempre que te sientas exhausto.
Ejercicio del movimiento del chi
Este ejercicio activo funciona
especialmente bien cuando se realiza con acompañamiento de tambores o de música
muy rítmica.
Ponte de pie y separa las piernas hasta la
anchura de los hombros.
Observa cómo te sientes de pie escuchando
la música.
Luego deja que el cuerpo se mueva y se
exprese al ritmo de la música. Deja que los brazos, la cabeza, las rodillas y
todo el cuerpo se envuelvan en sensaciones de movimiento, sacudidas y balanceo.
Esto no es un baile rutinario que se supone que se ha de hacer bien, sino un
movimiento espontáneo del cuerpo para liberar tensión y acumular chi. Sacude
los pies alternativamente. Deja que la espalda se mueva y se balancee, sacude
toda la tensión y el estrés de todas las vértebras. Suelta, suelta y suelta una
y otra vez.
Ahora detente y permanece quieto. Sentirás
la presencia del chi como un cosquilleo que fluye por todo tu cuerpo. Si tienes
tiempo, siéntate o estírate y haz el ejercicio de la esfera de chi.
Este ejercicio de movimiento se puede hacer
durante unos quince minutos en privado o en en una clase de ejercicio con
música. También es muy divertido hacerlos con los niños.
María Elena Gutierrez
Feng Shui
Reiki Master