El cacahuate o maní (Arachis Hypogaea), es una semilla que pertenece a la familia de las leguminosas; sus frutos son en forma de vainas y crecen de manera subterránea. Es originaria de América del Sur; sin embargo, la palabra es de origen náhuatl, y es una modificación de la palabra “tlalcacahuatl”, que quiere decir “semilla de cacao de la tierra”. Ha sido cultivada desde hace 7000 u 8000 años. Fueron los conquistadores portugueses y españoles, los que llevaron el cacahuate a Europa y África.
Estudios realizados por la Universidad de Florida, en conjunto con la Asociación Británica de Dietética (ABD), recomiendan el consumo de cacahuates para proteger el organismo de males que se asocian a enfermedades cancerígenas y coronarias. Steve Talcott, quien encabezó esta investigación por parte de la Universidad de Florida, afirma que esta pequeña semilla es buena para la salud, pues tiene tal cantidad de antioxidantes como la fresa, además de que supera con creces a otras frutas secas y verduras. En tanto, Frankie Phillips, de la ABD, recomienda que se consuman en combinación con otras frutas y verduras para potenciar sus valores en la salud. Indica también que las personas que están en un régimen para perder peso deben consumirlos con moderación, pues contiene calorías que podrían afectar los resultados.
Razones para consumir cacahuates:
• Es una fuente alta de proteínas; 30 gramos de cacahuate contienen alrededor de 7 gramos de proteína.
• Son de bajo índice glucémico (IG); contienen pocos hidratos de carbono, los cuales son complejos, y una alta cantidad de fibra. Son digeridos y absorbidos lentamente en el flujo sanguíneo; al consumirlos no se eleva de manera inmediata la cantidad de azúcar en la sangre, por lo que son una muy buena opción para la gente con diabetes.
• Contienen arginina; se trata de un aminoácido que se conoce como precursor del óxido nítrico, el cual es importante por ser un potente vasodilatador que ayuda a relajar las paredes de las arterias e inhibe la acumulación de plaquetas, evitando complicaciones cardiovasculares. Por la misma función, evita la acumulación de colesterol en las arterias. Es un alimento que combate la hipertensión.
• Contiene grandes cantidades de resveratrol, casi 30 veces más que las uvas; este componente ayuda a combatir enfermedades cardiovasculares y el colesterol. Además de que se ha descubierto que esta sustancia también ayuda a inhibir el crecimiento de células cancerígenas.
• Aporta buena cantidad de fibra, que ayuda a controlar los niveles de colesterol, triglicéridos y azúcar en sangre.
• Son una fuente natural de vitamina E, la cual es un antioxidante muy potente que ayuda a proteger nuestras células de los daños causados por los radicales libres. La vitamina E alimenticia se absorbe mejor que la que viene en comprimidos.
• Contienen ácido fólico, muy importante para las mujeres que están embarazadas o piensan estarlo pronto, pues evita que se produzcan mal formaciones en el sistema nervioso del bebé.
• Contiene minerales como el fósforo, magnesio y calcio, los cuales ayudan a formar huesos fuertes y sanos.
La ración recomendada para su consumo es de 1/3 de taza al día, es decir 30 gramos. Puedes consumirlos:
• En ensaladas.
• Puedes añadirlos al cereal del desayuno o comerla como colación.
• Son ideales para preparar salsas o aderezos.
Solo tienes que ser precavida en la presentación que consumes, pues hay algunas que por sus ingredientes altos en sodio y grasas saturadas, no resultan tan saludables como debieran; algunos ejemplos de estas presentaciones son los cacahuates japoneses, enchilados, salados etc. Busca la presentación más saludable y natural que encuentres.
La madre naturaleza nos brinda, como tantas veces, este alimento tan benéfico; aprovecha su valor nutritivo y los aportes que puede ofrecer a tu salud. Recuerda que el consumo debe ser moderado para realmente disfrutar al máximo de sus increíbles propiedades.