El SOP, también conocido por el nombre de síndrome de Stein-Leventhal y que afecta a entre el 6 y 10% de las mujeres en edad reproductiva, es un trastorno endocrino que arrastra frecuentes desequilibrios hormonales, lo que, como consecuencia, genera menstruación irregular y resistencia a la insulina.
Durante la investigación, de la que da cuenta la edición electrónica del diario Yediot Aharonot, se analizaron dos grupos de mujeres con un índice de masa corporal saludable (BMI), a las que se administró una dieta de 1 mil 800 calorías al día.
La mitad de ellas ingirieron 980 del total de las calorías en el desayuno, mientras que la otra mitad lo hizo en la cena.
El resultado fue que entre las primeras se registró un descenso del 8% en los niveles de glucosa y en la resistencia a la insulina, así como una caída del 50% en los niveles de testosterona.
En las segundas no se registró ninguna alteración, ni química ni hormonal.
Según la fuente, el primer grupo informó de un incremento dramático en el número de mujeres que ovularon y en los índices de fertilidad.
"La investigación demuestra que es importante el número de calorías que ingerimos al día, pero también lo es el momento en el que lo hacemos", dijo el profesor Oren Froy, de la Universidad Hebrea, que dirigió el estudio.