Este tipo de linfoma fue descubierto por el médico inglés Thomas Hodgkin en 1832 / Foto: Thinsktock
Texto: Dr. Juan Pablo Re
1. ¿Qué son?
Los linfomas son un conjunto de enfermedades oncológicas que se originan en las células de los ganglios, o del sistema linfático que forma parte del sistema inmunológico.
Los linfomas son un conjunto de enfermedades oncológicas que se originan en las células de los ganglios, o del sistema linfático que forma parte del sistema inmunológico.
Existen dos tipos:
1) El linfoma de Hodgkin. La causa de esta enfermedad es desconocida. Su incidencia aumenta en las personas con déficit en la inmunidad como los pacientes con VIH. Para su correcto diagnóstico se utilizan estudios moleculares.
2) Linfomas no Hodgkin. Constituyen un grupo heterogéneo de enfermedades y su incidencia ha aumentado en los últimos 50 años aproximadamente en un 3% anual.
2. ¿Qué incidencia tienen en la población?
En Estados Unidos se estima una incidencia de 79,190 casos por año, con una mortalidad anual de 20,130. Mientras que en Argentina, la incidencia en este mismo peridos es de 20 a 25 casos nuevos cada 100 mil habitantes.
Del linfoma de Hodgkin, en Estados Unidos se diagnostican 9,060 casos por año y solo 1,090 terminaron en muerte. Mientras que del linfoma no Hodgkin se diagnostican aproximadamente 70,130 nuevos casos por año, con 18,940 muertes anuales.
3. ¿Cuáles son los síntomas?- Pérdida de peso
- Fiebre de origen desconocido
- Sudoración nocturna
- Taquicardia
- Hipertensión
- Conglomerados de ganglios aumentados de tamaño y agrupados por regiones
4. ¿Cómo es el tratamiento?
Los esquemas de quimioterapia difieren entre los distintos subtipos de linfomas, pero siempre se utilizan esquemas con múltiples drogas, y se usan anticuerpos monoclonales como blanco terapéutico específico. Dado que ambos tipos de linfomas son de características muy similares, es crucial el diagnóstico anatomopatológico para diferenciar los subtipos, porque de estas diferencias microscópicas resultará el tratamiento específico.
Los esquemas de quimioterapia difieren entre los distintos subtipos de linfomas, pero siempre se utilizan esquemas con múltiples drogas, y se usan anticuerpos monoclonales como blanco terapéutico específico. Dado que ambos tipos de linfomas son de características muy similares, es crucial el diagnóstico anatomopatológico para diferenciar los subtipos, porque de estas diferencias microscópicas resultará el tratamiento específico.
El objetivo del tratamiento es curar al paciente, y para esto se puede utilizar la radioterapia, la quimioterapia o una combinación de ambas.
5. ¿Se cura?
Este tipo de tumores tienen una tasa de curación muy alta, y es por ello que es importante hacer un diagnóstico temprano y correcto.
Apegarse a la estrategia terapéutica y cumplir estos esquemas marcará la diferencia de la evolución de esta enfermedad.