En el menú cotidiano, estamos acostumbrados a consumir más o menos lo mismo, repitiendo el ciclo cada semana. A veces nos olvidamos de incorporar otras variedades de alimentos que, además de renovarnos con diferentes sabores, nos traen otros beneficios para el organismo. ¿Qué tal si en tu próximo plato cambias los cereales, reemplazando el arroz por la cebada? Acá te contamos todas las ventajas que puede traerte cuando la sumas a tu dieta. Pero antes…
Un poco de historia
Fue uno de los cultivos de cereal más antiguos domesticados por el hombre. Tanto, que se encontraron rastros de su almacenamiento en unas excavaciones al suroeste de El Cairo, que dan cuenta de que ya la consumían entre los años 10.000 y 5000 a.C.
Cebada: un alimento lleno dehistoria y benficios / Foto: Thinkstock
Los datos más certeros son de China (en el año 2800 a.C.) y de otros pueblos como el egipcio, el griego y el romano (con ella se alimentaba a los gladiadores), en algunos de esas civilizaciones era considerada como un alimento sagrado.
A través de los años y con los cambios de época se fue calificando como comida de pobres. Así, de a poco fue perdiendo su fama, ya que el trigo era el cereal elegido por las clases opulentas.
Por suerte, en la actualidad ha recuperado su prestigio, debido a que se sabe todos los beneficios que aporta a la salud. Además de contener fibra, muy conveniente para el aparato digestivo, este cereal aporta 8 de los aminoácidos esenciales que necesita nuestro cuerpo.
Sirve para todo:
-Ideal para los chicos: contiene gran cantidad de vitaminas, minerales y clorofila. Por eso, además de ser muy nutritiva (muy conveniente para la etapa de crecimiento), les sirve para mantener las defensas altas.
-Disminuye el colesterol malo: la cebada regula los niveles de colesterol y de lípidos grasos, porque tiene una sustancia llamada niacina o vitamina B3. Esta favorece la prevención de los problemas cardíacos y de la arterioesclerosis.
-Una fuente de fibra: ejerce un efecto de laxante suave, desintoxicando el cuerpo, ayudándolo a hacer una mejor digestión y colaborando con la formación de células intestinales. Además, previene la formación de cálculos biliares.
-Te mantiene joven: como dijimos, una de las vitaminas que componen la cebada es la B3, que además mejora el sistema nervioso y ayuda a cuidar la piel. Asimismo, tiene selenio, que favorece su elasticidad y la protege de los radicales libres. Y no solo eso, esta delicia cuenta con vitamina E, que es un antioxidante natural.-Mejor que una naranja: tiene el doble de vitamina C que la famosa fruta. Por eso, también se recomienda para evitar la gripa y el resfrío.
-Cuando hacemos ejercicio: por su rico aporte de minerales, se recomienda para los deportistaso para aquellas personas que gastan mucha energía.
-Incluso, para los trastornos urinarios: es muy recomendada en pacientes que tienen nefritis y otros problemas urinarios como la cistitis.
-Un plus: últimamente se dieron a conocer investigaciones científicas que aseguran que la cebada también sirve para regular los niveles elevados de azúcar en sangre.