Mantener una alimentación equilibrada siempre es importante, pero al practicar actividad física regular se vuelve mucho más necesario llevar una dieta que compense toda la energía gastada en cada entrenamiento.
El tipo de alimentación que lleves y las porciones que consumas siempre dependerán de la intensidad de la actividad física que practiques y el tiempo que dedicas a ello. Por eso, es mejor asesorarse con un especialista que pueda establecer con claridad la dieta a seguir en cada caso, sobre todo si hay enfermedades de por medio como diabetes o hipertensión.
El tipo de alimentación que lleves y las porciones que consumas siempre dependerán de la intensidad de la actividad física que practiques y el tiempo que dedicas a ello. Por eso, es mejor asesorarse con un especialista que pueda establecer con claridad la dieta a seguir en cada caso, sobre todo si hay enfermedades de por medio como diabetes o hipertensión.
Hay aspectos generales que toda persona que practica actividad física debería seguir para mantenerse saludable:
- Distribuir las calorías en varias comidas
Cinco o seis comidas saludables diarias se requieren para compensar las calorías y energía que gasta una persona cuando entrena. Su alimentación diaria debe incluir desayuno, colación de media mañana, almuerzo, once y cena ligera.
- Hidratos de carbono y proteínas
Si haces deporte varias veces a la semana, incluye todos los grupos de alimentos en tu dieta, poniendo especial atención en los carbohidratos (de preferencia integrales), ya que son los encargados de aportar energía. Las proteínas de buena calidad (huevo, pavo, pescado, pollo, carnes magras) son las que regeneran los músculos después de cada entrenamiento.
- Grasas saludables
Deben estar siempre presentes en tu alimentación, siempre y cuando sean no saturadas. Evita la mantequilla, salsas, cremas y opta por el aceite de oliva, frutos secos, paltas y pescados como la merluza, reineta, corvina o salmón.
- Azúcar y alcohol
Para que tu sistema responda mejor ante las exigencias deportivas, restringe al máximo tu consumo de azúcar y evita las bebidas alcohólicas que no aportan nada a tu organismo, sólo “calorías vacías”.
¿Puedo comer mientras me ejercito?
Si te da hambre al hacer deporte, come algo liviano que aporte hidratos de carbono y sea de rápida absorción. Un buen aporte son las clásicas barras de cereal, trozos de naranja, una banana o plátano, galletas integrales o una manzana.
Lo más importante al momento de realizar ejercicios es tomar suficiente líquido. Debes hacerlo cada 15 o 20 minutos. Si estás sudando demasiado y el clima es muy caluroso, puedes tomar bebidas isotónicas. Éstas te darán algo de energía y ayudarán a reponer los electrolitos, incluyendo el sodio y el potasio que pierdes con el sudor.