Se le conoce como una bomba que ayuda a empujar el flujo del fluido espinal y energía (Chi) al cerebro.
Es también el nexo que une los órganos sexuales, el recto y las piernas. El dolor ciático, que se proyecta en las piernas, se origina en el sacro; por lo tanto, su fortalecimiento aliviará esta desagradable molestia.
Este simple ejercicio de chikung fortalecerá nuestro sacro:
a. lleve energía a las manos, frotándoselas
b. Con los nudillos de las dos manos alternativamente, dese golpecitos y sóbese a ambos lados del sacro, sobre la zona de los ocho agujeros sacros y los costados por tres minutos (sienta el masaje como raspándolo).
Hágalo dos veces al día.
c. Sentirá una agradable sensación y la energía fluirá tanto a la cabeza como a las piernas con mayor comodidad.