Las frutas poseen propiedades nutritivas de marcada importancia
para la salud humana pues son ricas en vitaminas, minerales,
antioxidantes y fibra. Aportan pocas calorías y contienen entre 80 y 95%
de agua.
Las verduras también son imprescindibles para el bienestar pues sus
vitaminas, minerales y antioxidantes de la misma manera protegen contra
múltiples enfermedades.
Nunca está de más señalar como ambas constituyen una parte importante de las estrategias saludables para adelgazar.
UN NUEVO BENEFICIO
De esta manera ya ha sido confirmado como las personas consumidoras
de una mayor cantidad y variedad de frutas y vegetales tenían mucho
menos riesgo de desarrollar diabetes.
En esta investigación participaron 3,700 estadounidenses adultos
entre 40 y 79 años seguidos anualmente durante 11 años. De ellas 653
desarrollaron diabetes tipo 2 en el curso de la investigación.
El menor riesgo de presentar esta enfermedad se encontró entre
quienes consumían no solo una mayor cantidad de estos saludables
alimentos, sino también entre aquellos consumidores de una mayor
variedad.
Esto sugiere a las personas como no solo deben concentrarse en
cuantas porciones de frutas o vegetales comen en el día, sino de la
obtención de beneficios adicionales al aumentar la diversidad como parte
de una alimentación equilibrada.
Una porción equivale a media taza de vegetales cocidos o a una fruta fresca de tamaño mediano.
CIFRAS ELOCUENTES
Los investigadores, del Instituto de Ciencia Metabólica en Cambridge,
Gran Bretaña, publicaron sus resultados en la revista Diabetes Care.
Ellos encontraron en las personas consumidoras de 16 tipos diferentes de
frutas y vegetales por semana, un 40 por ciento de ser menos proclives a
desarrollar diabetes en relación a aquellas cuyo consumo promediaba
solo ocho tipos diferentes.
Por otro lado, el 21 por ciento de participantes con la menor ingesta
de vegetales y frutas, alrededor de dos porciones diarias, fueron
diagnosticados con diabetes tipo 2.
Por supuesto, las personas consumidoras de muchas frutas y vegetales
suelen ser diferentes del resto por su nivel educacional, el peso
corporal, la práctica de actividades físicas y la ausencia de adiciones
nocivas como el tabaquismo.
Aun teniendo en cuenta estos factores, de manera independiente el
consumo elevado de frutas y vegetales se mantuvo vinculado a un 21 por
ciento menos de riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
CANTIDAD CON VARIEDAD
La variedad en el consumo es clave pues asegura la ingestión de un
amplio y mayor rango de nutrientes, no solo de vitaminas y minerales
sino de compuestos de las plantas llamados fitoquímicos. Ellos ayudarían
a proteger a las células del daño conducente a enfermedades crónicas
como este tipo de diabetes.
Para garantizar una buena diversidad se sugiere incorporar variados
colores al inventario de frutas y vegetales del consumo hogareño.
Pero no debe pasarse por alto como todo esto constituye solo una parte de los estilos de vida saludables a nivel general.
Cumplir con todos ellos es un simple requisito para una excelente salud física y mental y una larga y saludable vida.