Este trastorno de la visión, que provoca dificultad para ver objetos a larga distancia, es cada vez más común en el mundo.
Aunque se desconoce la causa de la enfermedad se piensa que uno de los factores que la causan es pasar demasiado tiempo enfocando la visión en objetos cercanos, como la lectura.En varios países de Asia más del 80% de la población sufre miopía y en Estados Unidos y el Reino Unido entre 20 y 25% de la población padece el trastorno.
En el nuevo análisis, llevado a cabo en la Universidad de Cambridge, Inglaterra, se revisaron ocho estudios publicados recientemente sobre el vínculo entre el tiempo que pasa un niño expuesto al aire libre y su riesgo de miopía.
El estudio, que fue presentado durante la reunión anual de la Academia Estadounidense de Oftalmología que se celebra en Florida, incluyó a 10.400 niños y adolescentes.
Y encontró que por cada hora a la semana que un niño pasa en el exterior se reduce en 2% su riesgo de miopía.
Los resultados mostraron que los niños miopes pasaban en promedio 3,7 menos horas a la semana expuestos al aire libre que aquéllos con una visión normal o quienes sufrían hipermetropía (la dificultad para enfocar la visión a corta distancia).
Los investigadores creen que dos factores clave de esta protección contra el riesgo de miopía son una mayor exposición a la luz natural y pasar más tiempo enfocando la visión en objetos lejanos.
La miopía ocurre cuando la luz que entra al ojo no logra enfocarse correctamente y esto provoca que los objetos distantes aparezcan borrosos.
Medio ambiente
Aunque la enfermedad suele ocurrir en familias también hay varios factores ambientales que se cree pueden tener un impacto en ella.
"Incrementar el tiempo de exposición al aire libre en los niños podría ser una medida sencilla y costo efectiva con importantes beneficios para su visión y su salud general."
Dr. Anthony Khawaja
Los doctores Justin Sherwin y Anthony Khawaha, llevaron a cabo una selección de los estudios publicados sobre el impacto de la exposición al aire libre en la salud de la visión.
Encontraron, por ejemplo, que un estudio que comparó la visión de niños chinos que vivían en varios países encontró que los niños (chinos) que vivían en Australia tenían una mejor vista que sus pares en China o Singapur.
Este grupo de Australia leía tanto y tenía los mismos logros académicos que los que vivían en otros países.
La única diferencia, dicen los investigadores, es que pasaban más tiempo en el exterior.
Y más que estar realizando una actividad física específica, dicen los investigadores, este efecto protector parece surgir simplemente de estar más tiempo expuesto al aire libre.
Dos de los ocho estudios habían examinado si los niños que pasaban más tiempo al aire libre también pasaban menos tiempo en tareas de visión de corta distancia, como estudiando o jugando en la computadora.
Pero los estudios, afirman los investigadores, no mostraron este vínculo.
"Incrementar el tiempo de exposición al aire libre en los niños podría ser una medida sencilla y costo efectiva con importantes beneficios para su visión y su salud general" afirma el doctor Khawaja.
"Sin embargo, si deseamos hacer recomendaciones claras necesitamos obtener datos más precisos".
Agrega que es necesario llevar a cabo más estudios para entender cuáles son los factores más importantes de esta protección, como el mayor uso de la visión de larga distancia, menos uso de visión de corta distancia, la exposición a la luz ultravioleta natural o la actividad física.
Y otro factor importante que se debe considerar, agrega el investigador, es si al incrementar el tiempo de exposición al aire libre se logra evitar que la miopía empeore.