Los alimentos ricos en fibra reducen el colesterol malo / Foto: Thinkstock
A pesar de su mala reputación, el colesterol es necesario para nuestro organismo, porque facilita la fluidez de las membranas de las células y regula su trabajo.
Se origina de dos fuentes principales:
- Externa. Que proviene de la dieta diaria.
- Interna. Que produce el propio organismo.
El hígado sintetiza el colesterol que, de manera externa, aumenta con la ingesta de alimentos con alto contenido de grasas saturadas, el tipo de grasa que es sólida en temperatura ambiente, y que aumenta en la sangre los niveles del colesterol comúnmente conocido como malo. Lo podemos encontrar en alimentos como tocino, mantecas, alimentos fritos en general, entre otros.
La grasa que comemos pasa a través de las paredes intestinales para de ahí dirigirse al hígado. Este último órgano se encarga de repartir la grasa a todo el cuerpo ya sea para producir energía o para ser almacenada en las células, formando tejido adiposo que sirve como aislante del frío en el cuerpo y como reserva de energía.
Ya que el organismo es capaz de producir su propio colesterol, se da la posibilidad de que personas que no lo consuman en exceso, tengan niveles elevados de éste en la sangre, debido a algún desorden genético-metabólico.
3 tipos de colesterol
Para entender cómo es que el colesterol viaja y beneficia o afecta a nuestro cuerpo debemos saber qué son las lipoproteínas. Éstas transportan las grasas a través de todo el organismo y hay 3 tipos:
1. Las lipoproteínas de muy baja densidad (VLDL) son precursoras compuestas, sintetizadas en el hígado y a nivel de los capilares de tejido adiposo, mama, cerebro y glándulas suprarrenales entre otros. Son descompuestas por una enzima llamada lipoproteína lipasa para llegar a formar, después de un proceso, una LDL.
2. Lipoproteína de baja densidad (LDL). Es una molécula conocida como colesterol malo.Transporta el colesterol desde el hígado al resto del organismo, para que sea utilizado por las células del cuerpo para que desarrollen diferentes funciones. Cuando existe aumento de LDL hay también un exceso de colesterol. Estas moléculas se pegan en el interior de las arterias formando placas de ateromas (acumulaciones de grasas que bloquean el paso de sangre arterial, situación relacionada con infartos del corazón y accidente cerebrovascular, entre otros).
3. Lipoproteínas de Alta Densidad (HDL). Conocidas como colesterol bueno. Se encargan de transportar el colesterol desde los tejidos del cuerpo al hígado, son capaces de retirar el colesterol acumulado en las arterias y llevarlo de nuevo al hígado para su excreción.
Qué comer y qué no
Existen soluciones dietéticas para reducir los niveles de colesterol LDL y tener un aumento del HDL, por ejemplo:
- Consumir productos a base de soya
- Aumentar la ingesta de fibra proveniente de cereales integrales, frutas y verduras con cáscara
- Reducir el consumo de alimentos que aporten grasas saturadas como los alimentos fritos y capeados, el tocino, chicharrón, vísceras, quesos grasos como el gouda, manchego y la crema, entre otros.
- Utilizar aceites vegetales: cártamo, oliva o girasol.