Los adolescentes que hacen más de cuatro comidas por día y no comen muy rápido son más delgados.
Un estudio realizado por el Consejo Nacional de Investigaciones de España también encontró que desayunar ayuda a mantener un sano peso corporal, especialmente en los varones que no hacen ejercicio. La nutricionista Sonia Gómez Martínez, investigadora principal, subraya que su estudio es importante porque actualmente el 25% de los adolescentes tiene sobrepeso u obesidad.
Sus conclusiones fueron publicadas en la revista Journal of Adolescent Health.
MÁS DE CUATRO PARA LA FIGURA
Los especialistas explican que ya se sabe que la alimentación sana es fundamental para mantener un buen peso, pero se propusieron analizar si la cantidad de veces que un adolescente se alimenta influye en su figura.
Trabajaron con 1.978 varones y mujeres de 13 a 18 años de edad. Los pesaron y tomaron varias medidas corporales, como la circunferencia de su cintura. Los voluntarios también completaron un cuestionario donde informaron diversos aspectos de su estilo de vida, como la actividad física que realizaban. ″Para clarificar los efectos de la alimentación en la obesidad es fundamental estudiarla en conjunto con otros factores del estilo de vida, como la actividad física″, afirma Gómez Martínez.
La especialista notó que hacer más de cuatro comidas por día y comer despacio ayudan a mantener un buen peso corporal, independientemente de la actividad física que realiza cada persona.
Por otro lado, el estudio mostró que solo el 18,5% de los varones y el 48,5% de las chicas hacen actividad física regularmente.
Los especialistas explican que los adolescentes tienen requerimientos nutricionales especiales. Necesitan mucha energía y nutrientes, especialmente calcio, zinc y hierro. Por ese motivo recomiendan que los chicos tomen de tres a cuatro vasos de leche o yogur por día, dos porciones de comidas proteicas, seis a doce porciones de cereales, pasta, arroz y papas. A su vez sugieren moderar el consumo de grasas y azúcar.