Las golosinas y dulces industrializados son productos que les gustan a niños y adultos por igual.
Su agradable sabor es innegable pero estos productos no son saludables cuando se comen en grandes cantidades.
La mayoría de los productos dulces y golosinas contienen sustancias artificiales nocivas para la salud.
Las golosinas contienen altas cantidades de sustancias negativas como:
-azúcar
-grasas trans
-sal
-colorantes
-saborizantes entre otras sustancias artificiales y químicas
Consecuencias en la salud de un alto consumo de golosinas y dulces:
-incremento del peso e incluso obesidad
-aparición de celulitis
-daño en dientes
-desarrollo de diabetes
-reduce el apetito en los niños
-ansiedad e hiperactividad en niños
-aumenta la probabilidad de desarrollar arteriosclerosis
-incremento del colesterol
-altera la memoria y la capacidad de aprendizaje
-desarrollo de alergias y urticarias en la piel
Las golosinas tienen calorías vacías o sea que engordan y aportan calorías pero muy pocas sustancias nutritivas al organismo.
Es importante no prohibir totalmente el comer a los niños e incluso adultos un caramelo, chicle, chupetines o chocolate, sino consumirlo moderadamente y en forma espaciada.
El consumo excesivo de golosinas es nocivo para la salud de todas las personas por lo que se debería limitar su consumo.
Es importante educar a los niños para que sepan que pueden comer cada tanto alguna golosina pero que si se consume regularmente hace mal para la salud.
Además de consumir poca cantidad de golosinas es muy importante lavarse luego los dientes para prevenir las caries en la dentadura.