Quisiera a través de este artículo entregarte algunas herramientas para disminuir el consumo de dulces, chocolates, galletas y productos que en general solo son "calorías vacías".
Lo ideal sería comenzar desde la infancia y es por ello que te invito a no mantener esta costumbre con los niños que te rodean, ya sean: sobrinos, hijos o nietos. Cuando damos un dulce a un niño, seguramente lo hacemos de buena fé y porque ellos aman las golosinas. Pero aunque dar una pequeña golosina a un niño te parezca inofensivo, en la práctica no lo es, basta con ver los niveles alarmantes de obesidad infantil.
Las golosinas no son un producto que solamente deban evitar los niños sino que también deben evitarlo las personas adultas. La mayoría de las personas entienden lo malo que es consumir golosinas, pero no por ello reducen su ingesta, probablemente porque comer dulces es una salida rápida al hambre o porque muchas veces un chocolate es un consuelo para un momento de ansiedad. Tal vez si prestáramos más atención al etiquetado y leyéramos detenidamente los ingredientes que contienen las golosinas, comprenderíamos lo perjudicial que son.
En general las golosinas se componen de azúcar, gelatina, colorantes y aromatizantes, que los hace muy tentadores a los sentidos, pero nada saludables. Los chocolates, por su parte, cuyo origen es el cacao -un ingrediente que podríamos denominar como positivo- tienen un contenido tan alto en grasas no saludables como por ejemplo las del coco y la palma, que se pierden todas las propiedades que podría entregar el cacao. Los snack o aperitivos salados, aunque sean hechos a base de cereales contienen una cantidad de sal y grasas altísimas, que en ocasiones supera el 50% total del contenido.
Los fabricantes de este tipo de productos se esfuerzan en destacar el aporte energético de algunos de sus productos, y en otros casos destacan en contenido de calcio o que están hechos a base de leche, pero en la práctica su aporte nutricional real es tan insignificante que solo ayudan a engordar.
Enfatizando el caso específico de los niños, es apremiante enseñarles que existen otras alternativas alimenticias, además de disuadirlos de la mala práctica de llevar dinero como colación, ya que esta comprobado que al menos hasta los 14 años el principal objeto en que los niños emplean su dinero es en golosinas.
Consejos:
Recuerda que estos consejos no solo son buenos para ti sino para toda la familia y sobretodo predica con el ejemplo, así que no olvides: regálate una sabrosa fruta exótica y dejar la golosina en la estantería.