La granada puede ser un excelente aliado, para aliviar entre otros síntomas y malestares estomacales, la acidez, y es un gran aliado en aquellas personas que padecen de reflujo gatroesofágico, hernia de hiato o ardores estomacales.
Es una fruta que entre sus beneficios tiene la capacidad de mejorar las funciones de los riñones, y es ideal sobre todo en dietas en las que las personas desean perder peso, por su gran contenido de agua, poco contenido calórico, y además porque contiene cantidades significativas de magnesio, calcio, vitamina C y del complejo B. Como ya conocemos y lo hemos mencionado en otras oportunidades, estas vitaminas, son esenciales para prevenir el agrietamiento y posible envejecimiento de la piel, sequedad en las mucosas y decaimiento.
La granada más allá de todas estas características que hemos mencionado aún tiene más beneficios, porque nos aporta entre sus nutrientes, grandes cantidades de ácido cítrico y málico, presente también en otras frutas, pero que son sumamente necesarios para fortalecer el corazón y disminuir los síntomas que caracterizan a las crisis asmáticas.
La granada es una fruta completa que puede ser consumida como postre después de las comidas, o simplemente como parte de las colaciones de media mañana o media tarde. Es dulce y sabrosa, no olvides incluirla en tu alimentación.
