Al igual que nos ocurre con las estaciones del año, nuestros requerimientos nutricionales cambian dependiendo de la fases del ciclo menstrual en la que nos encontremos.
La alimentación y el estilo de vida son las claves para mantener una buena salud
Las estadísticas muestran que una de cada tres mujeres tenemos desórdenes menstruales relacionados con nuestro equilibrio hormonal. Algunos de ellos mejoran e incluso desaparecen cuando cambiamos nuestra alimentación.
Cumplir ciertas pautas puede mejorar nuestra salud reproductiva en general y la experiencia del ciclo menstrual en nuestro cuerpo. ¿Pero que pautas? Llevar una alimentación natural (que cubra nuestras necesidades), respetar las horas de descanso, estar hidratadas, realizar ejercicio físico diario y alejar todo aquello que nos estresa.
Existen muchos casos de irregularidades en el ciclo menstrual en mujeres aparentemente sanas. Muchas de estas causas se deben a déficits de nutrientes, a no cumplir las pautas anteriormente descritas o a no escuchar nuestro cuerpo, etc.
Cumplir ciertas pautas puede mejorar nuestra salud reproductiva en general y la experiencia del ciclo menstrual en nuestro cuerpo. ¿Pero que pautas? Llevar una alimentación natural (que cubra nuestras necesidades), respetar las horas de descanso, estar hidratadas, realizar ejercicio físico diario y alejar todo aquello que nos estresa.
Existen muchos casos de irregularidades en el ciclo menstrual en mujeres aparentemente sanas. Muchas de estas causas se deben a déficits de nutrientes, a no cumplir las pautas anteriormente descritas o a no escuchar nuestro cuerpo, etc.
Las causas más frecuentes de menstruaciones irregulares son la ansiedad y el estrés.
Algunos nutrientes importantes
Vitamina B6. Ayuda a nuestro cuerpo a fabricar serotonina, la hormona de la felicidad. Es clave para reducir muchos de los síntomas del síndrome premenstrual (PMS). Cuando tenemos carencias de esta vitamina, podemos experimentar cambios de humor e irritabilidad. Es importante sobre todo en la segunda mitad del ciclo.
Magnesio. Es el tranquilizante de la naturaleza. Al igual que con la vitamina B6, se han encontrado niveles mas bajos de magnesio en mujeres con síndrome premenstrual. Su deficiencia puede ser la causante de migrañas menstruales. El magnesio es mucho mas eficaz cuando se combina con vitamina B6, por suerte la naturaleza lo sabe y lo tiene en cuenta.
Hierro. Si las menstruaciones son muy abundantes y no comemos suficientes alimentos ricos en hierro, podemos llegar a desarrollar anemia (causante de cansancio, cambios de humor, dolor de cabeza, etc.). El hierro es un mineral importante para la ovulación y para mantener un ciclo menstrual regular.
Omega 3. Tiene efecto anti-inflamatorio. Por ello, puede ser un alivio en casos de inflamación o alta sensibilidad en el pecho. Investigaciones científicas muestran que también puede ser efectivo para casos de ansiedad, depresión y dolores de cabeza asociados al ciclo hormonal.
Reconciliarnos con nuestro ciclo menstrual y aprender sobre nuestra naturaleza cíclica, nos ayuda a conocer mejor nuestras necesidades de cada momento.
Vitamina B6. Ayuda a nuestro cuerpo a fabricar serotonina, la hormona de la felicidad. Es clave para reducir muchos de los síntomas del síndrome premenstrual (PMS). Cuando tenemos carencias de esta vitamina, podemos experimentar cambios de humor e irritabilidad. Es importante sobre todo en la segunda mitad del ciclo.
Magnesio. Es el tranquilizante de la naturaleza. Al igual que con la vitamina B6, se han encontrado niveles mas bajos de magnesio en mujeres con síndrome premenstrual. Su deficiencia puede ser la causante de migrañas menstruales. El magnesio es mucho mas eficaz cuando se combina con vitamina B6, por suerte la naturaleza lo sabe y lo tiene en cuenta.
Hierro. Si las menstruaciones son muy abundantes y no comemos suficientes alimentos ricos en hierro, podemos llegar a desarrollar anemia (causante de cansancio, cambios de humor, dolor de cabeza, etc.). El hierro es un mineral importante para la ovulación y para mantener un ciclo menstrual regular.
Omega 3. Tiene efecto anti-inflamatorio. Por ello, puede ser un alivio en casos de inflamación o alta sensibilidad en el pecho. Investigaciones científicas muestran que también puede ser efectivo para casos de ansiedad, depresión y dolores de cabeza asociados al ciclo hormonal.
Reconciliarnos con nuestro ciclo menstrual y aprender sobre nuestra naturaleza cíclica, nos ayuda a conocer mejor nuestras necesidades de cada momento.
Fuente: http://salud.facilisimo.com/blogs/general/alimentacion-y-ciclo-menstrual_1356103.html