Investigadores médicos siguen demostrando que el desarrollo y la progresión de una de las enfermedades más temibles de nuestra generación no es algo inevitable. La enfermedad de Alzheimer afecta a 1 de cada 10 personas a partir de los 65 años y casi la mitad de las personas de 85 años y mayores. La enfermedad se desarrolla de forma indectectada a lo largo de décadas debido a una carencia de nutrientes y anti-oxidantes y a causa de una carencia de actividad física regular. Puedes eliminar el riesgo de desarrollar esta forma devastadora de demencia tomando medidas adecuadas en la dieta y costumbres de vida hoy.
Caminar protege el cerebro de deterioro cognitivo
El volúmen cerebral está relacionado directamente con nuestra capacidad para aprender y crear nuevos recuerdos. Una de las marcas de la enfermedad de Alzheimer es una pérdida de células cerebrales debido a la muerte de estructuras neuronales críticas. Este efecto puede ser medido usando un MRI y es un indicador de deterioro cognitivo y progresión de la enfermedad. Los resultados de un estudio realizado por la Sociedad Radiológica de Norteamerica demostró que caminar el equivalente de 10 kms. a la semana reducía de forma significativa la reducción de volúmen cerebral a menudo visto en adultos mayores.
Los hallazgos revelaron que cantidades mayores de actividad física se asociaban con mayor volúmen cerebral. Los individuos con deterioro cognitivo demostrable eran capaces de mantener el volúmen cerebral y ralentizar el deterioro cognitivo y reducir de forma significativa el riesgo de desarrollar demencia. El autor del estudio concluyò “caminar puede mejorar la resistencia de tu cerebro a la enfermedad y reducir la pérdida de memoria a lo largo del tiempo”.
Una mala regulación del azúcar y resistencia ante la insulina degradan la salud del cerebro
Los efectos del azúcar en sangre y resistencia ante la insulina ahora se creen que tienen que ver con el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. Los resultados de un estudio japonés publicado en la revista Neurology demostraron que la resistencia a la insulina era particularmente dañino a la estructura del cerebro y tenía que ver con la formación de placas de proteína amiloide. Un alto nivel de azúcar en la sangre causa partículas disfuncionales conocidas como AGE (sub-productos de glicación avanzada) que degradan la estructura normalmente flexible de las células cerebrales. Eliminar el azúcar y los hidratos de carbono procesados que causan la formación de AGE puede mejorar la función cognitiva.
Niveles bajos de vitamina E activan la aparición de la enfermedad de Alzheimer
La vitamina E es un poderoso antioxidante que puede ser deficiente en la dieta a pesar de nuestros mejores esfuerzos. Los resultados de investigaciones publicadas en la revistaJournal of Alzheimer´s Disease halló que los daños por los radicales libres es una causa primaria de deterioro cognitivo. La vitamina E ha demostrado cruzar la barrera sangre-cerebro para suministrar protección frente a daños oxidativos y prevenir daños inflamatorios. El estudio demostró que cuando los niveles de vitamina E se reducen, se aceleran los daños de radicales libres y aparece la enfermedad de Alzheimer. Los frutos secos, semillas y verduras de hoja verde ofrecen una fuente excelente alimentaria de vitamina E.
La enfermedad de Alzheimer aparece tras décadas de una vida sedentaria y una dieta carente de nutrientes esenciales y anti-oxidantes que nuestro cerebro necesita para mantener una función óptima. Las personas que desean evitar esta enfermedad devastadora se mantienen físicamente activos, comen una dieta natural que ofrece antioxidantes saludables y evitan los alimentos procesados que acarrean disfunción metabólica. Puedes librar tu memoria y ampliar tu vida saludable con sencillos cambios en el estilo de vida.