Monday, November 10, 2014

Diez cosas cotidianas letales para el ébola


Pese a la dificultad de encontrar una vacuna contra el ébola, en realidad el virus no es tan invencible, pues al menos 10 cosas más o menos cotidianas, como la luz del sol, el vinagre o el blanqueador, son capaces de eliminarlo.

El virus del ébola sobrevive varias horas en superficies secas, como tiradores de puertas, y más tiempo en líquidos corporales, como la sangre. Sin embargo, algunos productos muy básicos son capaces de matar el virus, así como determinadas temperaturas. El portal 'Discovery' pasa revisa a 10 cosas cotidianas que pueden resultar letales para el ébola, sin olvidar que es un virus muy mortífero cuyo brote ya se ha llevado miles de vidas. 

El fuego mata al virus, aunque no rápidamente. Por esta razón los equipos y residuos médicos contaminados con el virus se consideran inofensivos tras ser incinerados.

Una solución compuesta de tan solo 3% de ácido acético mata al virus ébola al entrar en contacto con él. Este acido orgánico es el componente de los vinagres, que normalmente contienen desde un 3% hasta un 15% de ácido acético.

El virus muere al ser hervido durante 5 minutos, pero el problema es que puede sobrevivir al escapar con el vapor mientras el líquido todavía no alcanza el punto de ebullición.

El mismo efecto se logra al hervir el virus a fuego lento, a cerca de 60 grados Celsius durante un plazo de entre media hora a una hora.  

El ébola es vulnerable al alcohol o a productos que contienen alcohol, como los desinfectantes de las manos. Sin embargo, el virus puede penetrar en el organismo a través de microgrietas de la piel antes de que las propiedades del alcohol empiece a surtir efecto.

Lavarse las manos con jabón o antiséptico puede ser suficiente para matar el virus, aunque no para impedir su transmisión. No obstante, al igual que ocurre con el alcohol, el virus puede penetrar en el organismo a través de microgrietas de la piel antes de ser eliminado con jabón.

La lejía (cloro) que se usa como blanqueador de ropa puede matar al ébola. De hecho, una solución que contenga tan solo un 5,25% de lejía puede eliminarlo. Un efecto similar se logra con el hipoclorito de calcio (cal clorada) que se usa para desinfectar el agua de las piscinas.

El ébola puede sobrevivir a algunas dosis de radiación, si bien la radiación gamma junto con pequeñas cantidades de glutaraldehído resultan mortíferas para el virus, así como los rayos ultravioleta de tipo c, que acaba con él en pocos minutos.  
Finalmente, el sol también es letal para el ébola: cuando el virus se encuentra en superficies expuestas al sol se seca y muere.