Thursday, June 5, 2014

Astrología médica de los 12 signos

 

LA ASTROMEDICINA DE LOS EGIPCIOS: Si en su célebre astrología científica Ptolomeo no trató la Astromedicina, fue porque ya lo habían hecho sus antecesores maestros en el análisis de las relaciones entre los planetas y la salud del hombre. 

En el magnífico techo de la tumba de uno de los Ramsés (1), encontramos la representación de las 24 horas del día en 24 cuadros. En la parte baja de éstos, donde figuran las horas, aparece el grabado anatómico de un cuerpo humano. Este se encuentra dividido en siete segmentos que se relacionan con las constelaciones. 

El techo al que nos referimos nos indica que 1000 años antes de nuestra Era, los sabios egipcios habían establecido un cuadro de concordancia entre la salida de los astros y las partes del cuerpo humano.
Gracias a los estudios que sobre la astrología egipcia se están realizando, podemos precisar cuales eran los conocimientos reales que ellos poseían.

Recordemos que en el antiguo Egipto se aceptan multitud de dioses, entre estos Hermes( Thot) y Asklepos se relacionaban con la ciencia médica. Los Egipcios conocían la influencia del sol ( responsable de las estaciones), de la luna y de ciertos planetas.

Sus enseñanzas fueron considerablemente enriquecidas por los Caldeos y Griegos. La astromedicina tal como la conocemos actualmente, procede de una triple fuente genética: egipcia, caldea y griega.





LA ASTROMEDICINA DE LOS CHINOS : La astrología a ocupado tradicionalmente un lugar importante en la forma de gobernar a China. También la salud- era competencia en la organización China. Es pues, algo completamente natural que estas dos ciencias se hayan encontrado.

Con esta breves exposiciones he querido poner de manifiesto la importancia que en dos civilizaciones tan antiguas y trascendentes, como lo son la historia de la humanidad de Egipto y China, se haya concedido desde tiempos inmemorables a la medicina astrológica- o astromedicina ,para que así tomemos conciencia de que dicha temática atesora la suficiente valoración a todos los niveles como para que le dediquemos capital categoría.


De dicho estudio o exposición de astromedicina, vamos a efectuarlo por separado, signo por signo y siempre en función de la importancia del ascendente, el cual determina las reacciones del individuo al enfrentarse a una enfermedad igual a la de otra persona. Cabe mencionar que el conocimiento de la carta natal nos indicará de forma completa y decisiva las tendencias a las enfermedades.
A continuación los resultados generales del mencionado estudio.
 

Astrología Médica de:
 

ARIES: Tienen tendencia a subestimar sus enfermedades. El rechazo de éstas y sus consecuencias, así como su voluntad de recobrar rápidamente la salud, no hacen de ellos unos enfermos crónicos. Les gusta tanto la acción como para refugiarse en la enfermedad. Por voluntariosos corren el riesgo de acortar el tiempo necesario de una convalecencia normal y de volver demasiado pronto a sus actividades.
Deberían tener el valor de aceptar el dictamen de otras personas cuando de su salud se trata. Tampoco es prudente que  descuiden de los pequeños síntomas que a pesar de su fuerte naturaleza pueden constituir obstáculos en su vida. Se recuperan rápidamente, y rechazan seguir las indicaciones de quienes tratan de velar por su salud.

TAURO: No conceden importancia a los problemas de su salud; ya que por lo general se sienten bien. Siendo uno de sus mayores defectos su exagerado apetito, pudiendo padecer enfermedades de sobrecarga tales como ( trastornos cardíacos, gota, colesterol, etc.) con respecto a su vida sexual, se comportan como adolescentes que acaban de descubrir su sexualidad y no saben que hacer ni a quien contárselo.
Los oriundos de éste signo poseen algunos órganos frágiles; como la garganta y deben vigilarla más, para ahorrarse enfermedades. Los remedios que se les aconsejan deben seguirlos para conservar su salud.

GÉMINIS: Locuaz, viajero, nervioso y agitado, experimenta enormes dificultades para tomar una decisión concreta y luego, para mantenerse en ella. Tiene un idéntico comportamiento en el terreno de la salud. Es de los que se pasan tomando decisiones acertadas que se proponen seguir a partir del día siguiente…que nunca llega. No obstante, culto e instruido como es, conoce muy bien el origen de sus dolencias y de los medios sencillos para curarlas. Sin embargo, la transformación de un concepto intelectual en una realidad práctica, le resulta muy difícil y permanecerá siempre en un terreno incierto. No seguirá los consejos dietéticos que son importantes para conservarse en forma.

CÁNCER: Totalmente bajo la dependencia de un sistema simpático. Es el sujeto ideal para todas las enfermedades psicosomáticas, como la úlcera de estómago, por ejemplo. Es con frecuencia hipotenso y no le gusta hacer esfuerzos. Debe vigilar mucho su alimentación, más que cualquier otro signo del Zodiaco pues asimila mal los alimentos y los problemas se acrecentarán, todavía más, por las dificultades cotidianas. Le conviene llevar una vida tranquila alejada de las contrariedades, y practicar numerosos deportes, relajación y meditación, que le ayudarán a guardar la línea y a tonificarse.


LEO: Complejo, orgulloso e impulsivo, al mismo tiempo pudoroso y reservado, pero con marcada tendencia a la exageración y al drama, por lo que resulta difícil prever sus reacciones y, sobretodo, las que se refieren a las enfermedades. Puede perfectamente ocultar durante algún tiempo, por temor, cualquier enfermedad, y en cambio exagerar y dramatizar un síntoma insignificante hasta concederle una importancia vital. Algunos  nativos de este signo padecen durante largos años enfermedades que ocultan, por ejemplo cardíaca mientras que otras al menor síntoma de palpitaciones hacen una montaña. Su comportamiento ante las enfermedad depende del contexto en que se mueva. Si por razones familiares, profesionales o de prestigio debe mostrar su vitalidad, las enfermedades quedarán disimuladas, pero si cualquier dolencia puede usarla para tiranizar a su entorno, sin duda usará su mal para ello. Es por esta razón que las personas que lo rodean  deben ser buenos psicólogos para saber ciertamente el alcance de los síntomas.

VIRGO: Tienen tendencia a sobrestimar sus enfermedades y a transformar los pequeños contratiempos de la vida cotidiana, en enfermedades crónicas  que afectan negativamente a su salud. Se encuentran demasiado encerrados en sí mismos, son egocéntricos y pendientes de su propia felicidad. El mejor consejo es no concedan demasiada importancia a los pequeños síntomas que puedan tener y utilizar su energía practicando deporte, y tener suficiente voluntad para no prolongar su convalecencia y dejar la cama.

LIBRA: Necesitan gran cantidad de afecto, que no siempre encuentran, con lo que sus problemas se exteriorizan a través de manifestaciones cutáneas, ya sean eccemas, alergias.
Son bastante propensos  a las enfermedades endocrinas, las  concernientes a todas las glándulas de secreción interna (es decir a las que segregan hormonas), y en especial a los trastornos de las glándulas sexuales y de tiroides. Por esta razón es recomendable una dieta equilibrada y rica en minerales, a la vez deben estar en un entorno comprensivo y afectuoso, puesto que es vital para su subsistencia.

ESCORPIÓN: No se preocupa por la medicina. Goza de excelente salud y cuando está enfermo, no entiende muy bien lo que le pasa, a veces le falta poco para considerar  al médico culpable de sus males y acusarle de incompetentes a los que le cuidan.
El oriundo de este signo que es poco sensible al dolor físico, prefiere que se le trate rápidamente aunque resulte penoso, en lugar de aceptar un tratamiento menos doloroso pero más largo. Es por lo tanto muy importante que observe una regla fundamental, que es la de seguir el tratamiento tal y como ha sido prescrito.

SAGITARIO: Tiene tendencia a creerse al abrigo de cualquier enfermedad. Su constitución es por lo general robusta, su dentición excelente y su color saludable. Da signos aparentes de poseer buena salud y efectivamente la tiene…en un principio. Por desgracia su gusto a los riesgos, sus apuestas audaces y temerarias, pueden ocasionarle una que otra mala pasada a nivel de los músculos de la espalda. Sagitario, no debe temer nada más que a los excesos, ya sean deportivos o culinarios, pues es propenso a las intoxicaciones alimenticias ( vigile los alimentos que no sean frescos o de procedencia desconocida, ya que pueden actuar como si fuera veneno).

CAPRICORNIO: Meticuloso, no le falta prudencia ni ingenio para saber como debe actuar en cualquier circunstancia de la vida.
Goza de buena salud si sabe cuidarse, incluso más de lo que su aspecto exterior permite suponer. Deben evitar el frío, que es el principal enemigo para su salud; consumir minerales y vitaminas para fortificar sus sistema óseo; hacer ejercicios físicos y mentales para combatir los estados depresivos, y una buena dosis de humor que es la panacea mas eficaz contra su pesimismo.

ACUARIO: Se le ve nervioso y agresivo, y es esta su manera personal de descargar sus problemas, de esta forma se salva el nacido bajo la influencia de Acuario de las más modernas enfermedades nerviosas. Emotivo y nervioso, no es un ser terrenal, es asténico y linfático por lo que no aprovechará de los placeres de la vida, alimenticios ni sexuales, se puede decir que goza de una buena salud porque tiene órganos frágiles y consigue librar su excesos de energía de manera satisfactoria, pero debe vigilar su sistema cardiovascular, tobillos y los ojos, pues son sus puntos débiles.

PISCIS: Debe reservarse tiempo para vivir y distraerse, ya que este es el precio de su salud. Hipertenso como es, consulta con frecuencia al médico, incluso si su salud no le plantea más que pequeños problemas. Sus enfermedades no suelen ser agudas, son más bien crónicas. Frente a ellas encontramos la doble personalidad de Piscis: nada estoico pero perseverante y voluntarioso a la vez.