Thursday, May 22, 2014

Efecto de los Metales Pesados en la Salud

 
Efecto de los Metales Pesados en la Salud. Las enfermedades degenerativas son causadas frecuentemente por el tipo de vida que se lleva, siendo la dieta la causa principal.
 
Comemos demasiada grasa, azúcar y comida basura, se toman en exceso bebidas con alcohol, se ingieren demasiados productos químicos a través de conservantes, pesticidas y aditivos, e incluso el aire, el suelo y el agua están contaminados.
Un estudio indico en Estados Unidos que cada persona tiene al menos 167 sustancias químicas tóxicas en su flujo sanguíneo. De estas sustancias químicas, se cree que 76 son causantes de cáncer, 94 son tóxicas para el cerebro y sistema nervioso, y 79 han sido relacionadas con defectos de nacimiento y anormalidades en el desarrollo.
La carga corporal de la frase ha sido utilizado por los científicos para describir la pesada carga de los productos químicos que se pueden encontrar en una persona normal "el resultado de la exposición permanente a sustancias químicas industriales. Antes de que incluso nacen, los productos químicos sintéticos y metales pesados de todo tipo comienzan a construir en nuestros cuerpos tal como fue aprobado por la madre a través de la placenta.
En un estudio dirigido por Mount Sinai School of Medicine en Nueva York, en colaboración con la Comunidad Environmental Working Group, y los investigadores de dos laboratorios principales llevó a cabo un estudio sobre nueve voluntarios (un grupo que consiste en personas que estuvieron expuestas ni a productos químicos en su ambiente de trabajo, ni vivían cerca de una instalación industrial). Los resultados fueron notables.
Ellos descubrieron una media de 91 compuestos industriales, contaminantes y otras sustancias químicas en su sangre y orina y un total de 167 productos químicos. De los 167 productos químicos encontrados, 76 causan Cáncer en humanos o animales, 94 son tóxicos para el cerebro y sistema nervioso, y 79 causan defectos de nacimiento o desarrollo anormal.
Los metales pesados se encuentran en los alimentos que comemos, el aire que respiramos, en los edificios, ropa, maquinaria, agua del grifo, en pastas dentales y utensilios de cocina entre muchas otras situaciones cotidianas. Algunos metales son necesarios ya que son minerales que nuestro cuerpo necesita. Pero la mayoría de los metales pesados son tóxicos y causan cáncer, problemas de tiroides, deficiencias en el aprendizaje, problemas neurológicos, desequilibrios hormonales y muchos otros problemas de salud.
Estos metales son: - Aluminio: Altos niveles de aluminio afecta al sistema nervioso, el hígado y los riñones. Los estudios sugieren que una acumulación de aluminio puede causar hiperactividad en los niños y la enfermedad de Alzheimer y la demencia senil en personas mayores. Los alimentos y el agua pueden estar contaminados cuando se cocina con utensilios de aluminio. El aluminio también se puede encontrar en los desodorantes, los antiácidos y los blanqueadores de café.

- Mercurio: 
La toxicidad del mercurio se debe a las amalgamas dentales, pescados y mariscos de aguas contaminadas, fábricas productoras de papel y el agua corriente del grifo. El mercurio puede dañar al corazón, cerebro, pulmones, riñones, las glándulas suprarrenales, la hipófisis y las glándulas tiroides.

- Plomo:
 Altos niveles de plomo almacenado en los tejidos del cuerpo puede ser letal.
El plomo se encuentra en pinturas antiguas, tuberías de plomo, cerámicas recubiertas con plomo que están rotas o dañadas, tabaco, contaminación atomosférica y gases procedentes del tráfico, sartenes sin revestimiento y frutas y verduras expuestas a humos tóxicos procedentes de la circulación de los vehículos. Los síntomas de envenenamiento por plomo incluyen problemas de comportamiento, enfermedades del corazón, presión arterial alta, anemia y daño al corazón y al cerebro. El plomo también desplaza al calcio en el cuerpo.

- Arsénico:
 El arsénico se encuentra en las almejas, cerámica, insecticidas, y el papel para revestir paredes. En grandes dosis es mortal.


- Cadmio: El cadmio se encuentra en o cerca de zonas industriales, humo de los cigarrillos, yesos antiguos y en productos de caucho. El exceso de cadmio reemplaza al mineral zinc en los tejidos del cuerpo, afectando a los riñones y causando presión arterial alta.
Como los metales pesados no son metabolizados por el cuerpo, se acumulan en los tejidos por lo que los nutrientes esenciales no pueden ser absorbidos.
Los metales pesados provocan inflamación crónica y deterioro del sistema inmune que puede conducir a enfermedades crónicas como la artritis y el cáncer. Los síntomas comunes de intoxicación por metales pesados incluyen depresión, dolores de cabeza, problemas digestivos, presión arterial alta, fatiga, dolor muscular, confusión mental, estreñimiento y desequilibrios hormonales.
Si tenes arreglos dentales de amalgama los debes de sustituir en un dentista. Bebe mucha agua purificada, utiliza sólo desodorantes y cosméticos naturales, evita el tabaco y sustituye los utensilios de cocina de aluminio por los de acero inoxidable. Lleva a cabo con frecuencia procesos de desintoxicación, especialmente si estás expuesto a los materiales utilizados para la construcción de tejados, o si trabajas o vives cerca de una gasolinera, o en cualquier lugar donde se emita o manipule productos químicos tóxicos peligrosos.
La desintoxicación debe de llevarse con alimentos crudos, jugos y batidos verdes que contengan abundante clorofila, agregando cilantro y chlorella que ayudan a eliminar los metales del cuerpo.
Jugos que son beneficiosos para la desintoxicación incluyen zanahorias, remolacha, col rizada, espinacas, ajo, hierba de trigo o wheatgrass, cebada forrajera, perejil, spirulina, chlorella y cilantro. Otras opciones son frutas tales como uvas, cerezas, arándanos y limones.
El jugo no sólo provee al cuerpo de cantidades masivas de nutrición, sino que vacía y limpia todos los órganos, equilibra el metabolismo y ayuda en la activación de enzimas eficaces. Es muy importante utilizar solamente frutas y verduras orgánicas que estén libres de insecticidas, pesticidas y productos químicos.